La Policía Nacional de Almería activó ayer una operación para detener a los aficionados ultras de la Unión Deportiva de Almería a los que se vincula con los disturbios que tuvieron lugar el pasado 12 de enero en Córdoba, cuando el equipo almeriense iba a enfrentarse al equipo local. Las detenciones se iniciaron en durante la madrugada de este jueves, 3 de abril. Los detenidos han pasado el día en el calabozo, y por el momento se desconoce cuándo pasarán a disposición judicial, aunque fuentes cercanas a la investigación adelantan que esto podría suceder el sábado.

Ese domingo, varios aficionados radicales del Córdoba Club de Fútbol iniciaron una batalla campal en las inmediaciones del estadio Arcángel contra hinchas de la UD Almería y se produjo lanzamiento de mobiliario urbano, sillas y mesas. Durante el enfrentamiento, se produjeron daños severos en algunos establecimientos de hostelería, aunque no se registraron heridos de gravedad.

Hasta el momento se han producido 14 arrestos en la provincia de Almería, aunque no se descarta que el número pueda elevarse en las próximas horas, e incluso extenderse a otros territorios, según ha podido saber este medio de fuentes cercanas a la investigación. Las detenciones se suman a las diez que ya practicó la Policía Nacional en Córdoba, en el marco de la Operación Moreal —en referencia a la plaza en que se produjeron los disturbios—.

A los detenidos en Córdoba, uno de ellos militar, se les atribuye un delito de alteración del orden público y otro delito de riña tumultuaria. Fueron puestos en libertad provisional, pero la autoridad judicial impuso una medida cautelar de prohibición de acercamiento a los estadios de fútbol en las jornadas en que se desarrolle un encuentro deportivo.

El operativo se ha puesto en marcha tras unas amplias labores de investigación, en las que han colaborado efectivos de varias provincias y agentes de la Comisaría General de Información.