La Puerta de Purchena no siempre se llamó así: la confusión que cambió su historia
En la época medieval albergaba una de las puertas más importantes de la muralla de la ciudad

Imagen de la Puerta de Purchena, en el centro de la capital almeriense.
La Puerta de Purchena es, sin duda alguna, uno de los lugares más emblemáticos y concurridos de Almería. Su nombre y ubicación tienen una rica historia que refleja la evolución urbana y cultural de la ciudad a lo largo de los siglos.
Hasta mediados del siglo XIX, la Puerta de Purchena formaba parte integral de las defensas de Almería. Sin embargo, en 1855, con el objetivo de modernizar y expandir la ciudad, se decidió derribar las antiguas murallas.
Este acto permitió la creación de nuevos espacios urbanos y facilitó el crecimiento de la ciudad más allá de sus límites medievales. En el lugar donde se erigía la antigua puerta, se configuró una amplia plaza que, con el tiempo, se convirtió en el corazón neurálgico de Almería.
Durante la segunda mitad del siglo XIX y principios del XX, Almería experimentó un notable auge económico. Este crecimiento propició la construcción de edificaciones burguesas y palaciegas en torno a la Puerta de Purchena, dotando a la zona de una arquitectura característica de la época. Un ejemplo destacado es la ‘Casa de las Mariposas’, el emblemático edificio que data de principios del siglo XX y que refleja el estilo modernista del momento.
Hoy en día, la Puerta de Purchena es mucho más que un punto geográfico; es un símbolo de la identidad almeriense. Declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1991, es punto de encuentro para los almerienses y para los que nos visitan, y alberga una intensa actividad comercial y cultural.
La plaza conecta con arterias principales de la ciudad, como el Paseo de Almería, la Rambla Obispo Orberá o las calles Granada y Pablo Iglesias, lo que la convierte en un punto estratégico para el tránsito y la vida urbana.
Pero, ¿de dónde le viene el nombre de Puerta de Purchena? En la época musulmana, la muralla que rodeaba la ciudad contaba con varias puertas de acceso, y la aquí situada era una de las más importantes, a la que se llamaba como Puerta de Pechina porque conectaba directamente con el camino que llevaba a la localidad de Pechina (Bayyana).
Tras la reconquista cristiana en 1489, se produjo una confusión toponímica, confundiendo los nombres de Pechina (Bayyana) con el de Purchena (Bursana).
Como resultado de este error que cambiaba la localidad del Bajo Andarax por la del Valle del Almanzora, la originaria Puerta de Pechina pasó a ser conocida como Puerta de Purchena, un cambio de nombre que se consolidó con el tiempo y perdura hasta nuestros días.