La Junta explica las ayudas a las OPFH para evitar que “ni un euro se quede sin repartir”
Almería es la provincia andaluza a la que se destinan la mayor parte de los fondos

Reunión del delegado con los productores.
La Consejería de Agricultura reunió ayer a más de cuarenta OPFH (Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas) de la provincia de Almería para avanzarles las novedades de las ayudas que la Unión Europea destina a este tipo de organizaciones y evitar, con ello, que “no se quede sin invertir ni un euro de lo que llega de Bruselas”, afirmó el delegado provincial José Manuel Ortiz Bono.
Para la Junta, Almería es el objetivo número uno al tratarse de la provincia andaluza con mayor presencia de este tipo de organizaciones, la mayoría amparadas por las cooperativas. Hasta cerca de la mitad del total de los fondos que llegan a Andalucía acaban siendo para productores almerienses.
Las ayudas a las OPFH se consideran fundamentales en un sistema de producción agrario como el almeriense, ya que se trata de facilitar inversiones en cuestiones esenciales como es el control o la lucha biológica, los procesos de mejora de la calidad, la incorporación de tecnología o las acciones encaminadas a buscar mayor sostenibilidad.
Más peticiones
Andalucía contará en los próximos cinco años con 327 millones para sus OPFH, y de ellos se calcula que Almería se llevará más del 40 por ciento por dinamismo y tipo de actividad. Serán en torno a los 40 millones de euros anuales.
Ortiz Bono entiende que se trata de presentar proyectos ya ajustados a la normativa y a los cambios técnicos “para evitar que se pierdan ayudas”, y señaló que Almería ya lideró las peticiones en 2014 con proyectos por importe de 45 millones, y crecerá de nuevo este año alcanzando los planes los 47 millones de euros.
El delegado sostiene que este tipo de ayudas, aunque pequeñas en comparación con otras, son esenciales para Almería porque dan respaldo a los cambios y mejores introducidos en su agricultura, entre otros haber sido capaces de pasar del control químico de plagas a la lucha biológica para más de 26.000 hectáreas repartidas por la provincia.