Parecería increíble pensar que Almería y Bolonia guardan alguna coincidencia, sobre todo si se tienen en cuenta los más de 1.910 kilómetros que las separan. Sin embargo, han sido dos creadores de contenido almerienses, que comparten una misma cuenta, los que han encontrado una conexión genuina. En concreto, el protagonista en este caso es el municipio de Vera, situada en el Levante Almeriense. 

Un parecido razonable

En su afán por encontrar parecidos entre los pueblos almerienses y otras ciudades italianas, la cuenta @doblehuella lo explica con  más detalle. "Bolonia es historia, ladrillo rojo y universidad pero, ¿y si te digo que se parece a un pueblo de Almería más de lo que imaginas? Ambos han sido prácticamente reconstruidos desde cero". 

Trazado renacentista y calles rectas

Hoy es conocida por su atractivo turístico y sus playas, pero tiene una historia marcada por una gran tragedia. El 9 de noviembre de 1518 la historia de la ciudad de Vera y su comarca dio un giro de 180 grados. 

Un terremoto acaecido cuando el reloj marcaba las once de la noche aproximadamente devastó por completo la antigua ciudad, situada en lo que es hoy el cerro del Espíritu Santo, presidido por una estatua de Jesucristo que deja a Vera a sus pies.

Tras la catástrofe, los supervivientes decidieron no reconstruir en el mismo sitio. En cambio, se trasladaron a una colina cercana, donde había una antigua torre árabe y allí fundaron la Vera actual. La ciudad nueva fue diseñada con un trazado más ordenado y defensivo.

Uno de los edificios más simbólicos tras el terremoto fue la Iglesia-Fortaleza de la Encarnación, construida como parte de las medidas defensivas de la nueva ciudad. Fue pensada no solo como templo religioso, sino como refugio en caso de ataques.

Un recuerdo histórico

Cada año, en Vera se recuerda este evento como un capítulo crucial de su historia. La memoria del terremoto ha quedado grabada en documentos históricos y en la cultura local, ya que ocasionó la muerte de al menos 150 personas y dejó en estado ruinoso prácticamente todas las viviendas, murallas y la Alcazaba que se levantaban en el Cerro del Espíritu Santo.