La Virgen del Mar, patrona de Almería, afronta en cuestión de unos pocos meses dos aniversarios históricos: en 2026 se celebrará el 75 aniversario de la coronación canónica y en 2027 el 525 aniversario de la aparición de la talla mariana en la playa de Torregarcía. Con esas dos efemérides en el horizonte, el nuevo hermano mayor, Jorge Juan Fernández Compán, formó una comisión que ya empieza a dar sus primeros frutos: la Hermandad de la Virgen del Mar ha aprobado una fuerte apuesta patrimonial para los próximos meses. 

Por una parte, de cara a 2026 y coincidiendo con el 75 aniversario de la coronación de la Virgen del Mar, la junta de gobierno ya ha encargado un nuevo rostrillo para la Virgen del Mar, una obra en oro y con piedras preciosas diseñada y realizada por el taller jerezano de joyería El Oribe.

Para su realización se ha llevado a cabo un cuidado y meticuloso estudio del rostro de la propia Virgen del Mar, con la intención de que la nueva obra permita contemplar la cara de la patrona de Almería completamente y desde distintos ángulos, al contrario de lo que sucede con otros rostrillos que tiene a día de hoy la talla mariana. 

Pero no es la única obra que saldrá del taller situado en el centro de Jerez de la Frontera con destino Almería: también se ha aprobado la ejecución de una ráfaga, una original obra que desde la propia hermandad explican que se usará en ocasiones especiales y que no cambiará la idiosincrasia estética de la Virgen del Mar, pero sí aportará algo totalmente novedoso.

Un manto de salida para 2027

Y, tras los estrenos de orfebrería, la Hermandad de la Virgen del Mar trabaja en otro gran estreno: para conmemorar en 2027 el 525 aniversario de la aparición de la Virgen del Mar en la playa de Torregarcía, se ha aprobado la realización de un nuevo manto de salida para la patrona de Almería. 

Ya se barajan varios nombres para encargar el diseño, así como de bordadores que ejecuten finalmente la obra. Más allá de encargar una nueva joya textil para la salida procesional de la Virgen del Mar el último domingo de agosto, la intención de la hermandad de la patrona pasa por conservar al máximo el manto regio, el que usa habitualmente y que fue regalado por Isabel II tras su visita a Almería. 

Junto al de los gusanos, el manto regio es de los más antiguos de la Virgen del Mar, y recientemente brilló con luz propia en una muestra de patrimonio realizada en Sevilla. Ahora, y con la intención de preservarlo, la idea de la hermandad es la de reservarlo para los momentos más especiales, encargando para ello un nuevo manto de la máxima calidad posible con el que, además, se pueda recordar para siempre el histórico 525 aniversario de la aparición de la talla de la Virgen del Mar en Almería.