El próximo miércoles 2 de julio, Netflix estrena el capítulo final de ‘Desaparecido’, thriller vasco con Gorka Otxoa, Itziar Atienza, Jon Lukas y la cantante Leire Martínez que, desde su lanzamiento, se ha colado semana tras semana en el top 10 de la plataforma. Rodada de forma simultánea en castellano y en euskera para ETB, este ambicioso proyecto marca el debut como directora de producción en una serie de Loles Peña (Córdoba, 1988), profesional con una sólida trayectoria en el audiovisual almeriense.

“Cuando me propusieron este cargo, sentí una mezcla de emoción y vértigo”, recuerda en conversación con LA VOZ. Después de varios años en Madrid, apenas llevaba tres semanas en Almería, donde reside desde hace más de una década (aquí trajo desde Málaga el recordado festival CineJoven). “Venía dispuesta a estar un tiempo con los míos y a centrarme en proyectos personales que tenía pendientes”, explica. 

Rumbo al norte

Pero sonó el teléfono y llegó una oportunidad que implicaba “dejar atrás muchas certezas” y enfrentarse a “un síndrome del impostor que se hacía pesadísimo”. Así que se lió la manta a la cabeza y puso rumbo al norte. El País Vasco, escenario de ‘Desaparecido, se acabaría convirtiendo’ en su hogar durante seis meses.

“Llegar a Euskadi fue, al principio, como entrar en otro mundo”, asegura. Nadie la conocía y tuvo que adaptarse rápido a los ritmos de una producción exigente: reunir y coordinar a un equipo de más de 70 profesionales —en su mayoría de origen euskaldun—, buscar localizaciones, conocer proveedores y cerrar presupuestos... todo en menos de dos meses.

Perdidos en el monte

La serie, de ocho episodios, comienza con la desaparición de un joven tras una acampada en el monte con sus amigos. Un vídeo será la pista con la que comience una investigación que acabará sacando a la luz secretos ocultos.

Un rodaje muy exigente, de “trece intensas semanas”, con muchísimas secuencias en escenarios naturales. Un gran contraste después de haber rodado íntegramente en Almería, también como directora de producción, ‘Amanece’, ópera prima de Juan Francisco Viruega. “Allí primaba el sol, el desierto y la playa y aquí la montaña, la niebla y la lluvia. ¡Una odisea para una almeriense!”.

La experiencia incluyó “jornadas maratonianas”, un clima exigente y hasta una pequeña aventura: llegó a perderse en mitad del monte y tuvo que andar 10 kilómetros hasta alcanzar otro pueblo. “El equipo humano fue lo mejor: personas generosas, comprometidas, que me hicieron sentir en casa aunque estuviera tan lejos. No me dejaron sola ni siquiera cuando tocaba tomar decisiones poco agradables”, confiesa.

Hubo “días muy duros”, reconoce, pero al final, el equipo “hizo piña” para sacar adelante la serie “de la mejor manera posible: juntos”.

Una identidad que suma

Hasta el ecuador del rodaje, Loles Peña contó con Trini Quevedo como jefa de producción. “Ya estuvo conmigo en ese mismo puesto en ‘Amanece’, y su presencia hizo que la transición fuera más llevadera”, explica.

‘Desaparecido’ (‘Desagertuta’ en su versión en euskera) se estrenó en el Teatro Victoria Eugenia de San Sebastián con excelente acogida de público y crítica. En Netflix llegó a alcanzar el número 1 entre las series más vistas en España. “Ahí sentí que todo el esfuerzo había merecido la pena”, afirma.

Más que un trabajo, una experiencia reveladora. “Me enorgullece haber formado parte de este proyecto desde mi identidad: como mujer, como almeriense, como productora que cree en contar historias de otra manera”, subraya.