“Interpretamos las huellas del pasado con la capacidad de imaginar el futuro”, así es el lema de Atrévete a Saber, una propuesta innovadora que nació en la Feria de las Ideas de la Universidad de Almería y que hoy en día sigue creciendo y expandiéndose para convertirse en una de las empresas referentes en el mundo rural.

“Pon humanistas en tu vida, no somos guías turísticos, somos intérpretes del patrimonio”Álvaro Castro, presidente Atrévete a Saber

Tres jóvenes con una idea y un propósito: ofrecer alternativas a los estudiantes del sector de las humanidades, desgastados bajo la premisa de la “poca inserción laboral” de este campo. ¿Cómo? Con la gestión cultural de los municipios de menos de 5.000 habitantes

Han pasado 2 años desde la victoria de esta cooperativa, formada por Álvaro Castro, Ángela Suárez y Carina Tripiana, en la Feria de las Ideas de la UAL, y es que, por aquel entonces, ya ofrecía servicios culturales a los municipios de Fondón, Fuente Victoria y Benecid.

Su funcionamiento se rige, en palabras de Castro, su presidente, por lo siguiente: “Miramos al futuro sabiendo que las oficinas de turismo de las zonas rurales, menores de 5.000 habitantes, su patrimonio histórico, cultural y natural, y su yacimiento arqueológico y centro de interpretación son motor de desarrollo económico, político y social”.

Además, remarcan que el turista se convierte en viajero, “en ese viajero romántico del siglo XIX”, pero ¿cuál es la diferencia?

“El turista va a visitar, a conocer y a consumir, pero cuando marcha, lo hace convertido en en ese viajero romántico, que solamente buscaba viajar y conocer para aprender del lugar en el que se encontraba”, explica con ilusión Castro.

Otra de sus líneas se centra en la desmitificación de las zonas rurales como espacios desfavorecidos.

“Las zonas rurales tienen mucho de qué hablar”Álvaro Castro, presidente Atrévete a Saber

Un ejemplo de ello es Tabernas, municipio que están gestionando desde hace unos meses. Atendiendo a la llamada del ayuntamiento, siendo un hecho que los municipios de menos de 5.000 habitantes cuenten con poco capital humano, que expresaron la necesidad de desvincularse de espacios culturales que no podían gestionar adecuadamente, ya que en los últimos años se había desatendido en exceso la gestión de los mismos, sin horarios fiables que aseguraran al visitante que pudieran acudir a los espacios culturales. 

Con la introducción de Atrévete a Saber en este municipio,  se ha hecho posible tener abierto al público lugares, en este caso, como el Centro de Interpretación Terrera Ventura y Desierto de Tabernas.

Sin embargo, aún queda mucho por hacer, como la edición de los horarios en internet del centro, aún así, la cooperativa está trabajando en redes sociales, aunque abogan por el conocido "boca a boca", herramienta infalible de los pueblos para hacerse oír y saber lo último sobre los centros gestionados. 

Terrera Ventura, la gran olvidada 

En 1929, el poeta almeriense Modesto García Contreras encontraba por accidente el yacimiento arqueológico de Terrera Ventura, situado en el municipio de Tabernas. A partir de ahí sucedieron varios intentos de campañas de excavación para seguir recolectando restos y poder identificar e interpretar al poblado, no obstante, los sondeos del terreno no vieron la luz hasta los años 50, continuando hasta el 74.

El municipio cuenta con el Centro de Interpretación de Terrera Ventura y Desierto de Tabernas, un espacio dedicado a la divulgación del patrimonio natural, cultura e histórico del lugar, que actualmente gestiona la cooperativa Atrévete a Saber, además de la Oficina Municipal de Turismo.

Desde esta empresa, y con el fin de que los visitantes conozcan el poblado de hace más de 5.000 años, sensibilizan a los viajeros a través de preguntas que deben resolver con el fin de concluir en el aprendizaje del lugar, así, vinculan las fuentes primarias con la interpretación del patrimonio para conseguir una charla lúdica, divertida, siempre sumergiendo al visitante dentro del relato. De esta manera, el visitante es un agente activo en la conversación de la historia, en este caso, la de Terrera Ventura.

Además, han conseguido vincular el centro con la legislación educativa, lo que les permite que colegios e institutos visiten el lugar, donde introducen el espacio geológico del desierto, además de la historia, a su vez de la prehistoria que marca a Almería con sus hallazgos, en concreto, el yacimiento arqueológico Terrera Ventura, que fue declarado Bien de Interés Cultural en 2021, un espacio que además cuenta con restos contemporáneos a Los Millares, la primera ciudad Estado, lo que provoca que tengan una gran afluencia de público.

Una de las medidas innovadoras de la cooperativa ha sido la implicación de la comunidad local en el centro de interpretación, a través de las fuentes orales, consiguen reconstruir la memoria del espacio de Terrera Ventura.

Las líneas a seguir con este yacimiento es hacer una base de datos de los artículos científicos existentes. En Almería se está viviendo una especie de ‘boom’ arqueológico, por ejemplo, se está trabajando la fortaleza árabe desde la Universidad de Granada con José María Martín Civantos. Lo que sí está claro es que está sobre la mesa el proyecto de nuevas excavaciones en el yacimiento para poder conocer más de la sociedad que habitó en Tabernas hace 5.000 años.

Nuevos horizontes

Atrévete a Saber ha venido para quedarse, es un hecho, en los últimos años han procurado estar en todos los espacios o foros posibles. Un ejemplo de ello es el Grupo de Desarrollo Rural de Los Filabres, lo que les permite transmitir las necesidades de las zonas rurales que gestionan.

A nivel autonómico, cuentan con un espacio en el Consejo Rector de la Federación Andaluza de Cooperativas, donde visibilizan a la gente joven que viven en los pueblos rurales, no se limitan solo a la comunicación de redes sociales.

Recientemente, fueron nominados en el top 50 de emprendimiento de Andalucía, lo que fue “un chute de energía” según Castro, están poniendo el foco en las zonas rurales lo que significa que la historia, la gestión cultural y las humanidades., tienen un hueco en nuestra sociedad. 

Además, desde el programa formativo Campus Rural, impulsado por el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, lo que ha conseguido que en Tabernas vayan a tener 5 estudiantes en prácticas, ayudándoles a desarrollar programas culturales, deportivos y económicos.

Cada reconocimiento es un paso más hacia el avance de las zonas rurales, la atracción de jóvenes y el desarrollo de los espacios culturales, porque los pueblos también tienen de qué hablar.