Seguro que no era la forma que esperaba para regresar a Tarragona pero los caminos de la vida no están trazados y ha querido el destino que desde el 12 de mayo ejerza como entrenador del Nástic en la que ya es su tercera etapa en el Nou Estadi. El cese de Dani Vidal a las puertas del Play Off de ascenso ha significado el retorno de uno de los grandes del banquillo. Luis César Sampedro no pisaba un banquillo desde 2021 cuando estuvo al frente del CD Lugo. La llamada de Tarragona para algo tan bonito tuvo la debida respuesta y ha firmado hasta el 30 de junio para devolver el brillo a un club que proyectó su carrera. En esta tercera etapa no le han dado ni tiempo para conocer a los futbolistas, pero ni lo necesita, ya que su fútbol se aprende fácil y los jugadores saltan al campo convencidos de la tarea. Siempre es bueno tener a Luis César en el banquillo.

No ha vendido una gaita a nadie, y como buen gallego no sabes si sube o baja la escalera, porque conoce el oficio y lejos de lanzar las campanas, se centra en motivar a sus jugadores y tocarles las fibras sensibles de cara a un ascenso que le daría un plus en lo deportivo y en lo económico. Su discurso para la grada es común y para el futbolista tocar las fibras es de obligado cumplimiento. Ya se ha vivido el primero de los asaltos para subir a LaLiga y el campo a reventar pudo cantar un gol que les mete de lleno en la pelea con un Real Murcia que llenará la Nueva Condomina. Si hay un entrenador capacitado para subir al Nástic ya lo tiene Tarragona en su banquillo, por lo que hay que ser optimistas de cara a lo que se avecina: que no va a ser fácil.

Mensaje

Luis César Sampedro ha tenido poco tiempo para hacerse con el control total de la plantilla pese a que la conocía desde fuera. El cese de Dani Vidal y su llegada a Tarragona fue muy rápido y se puso manos a la obra para hablar claro a los profesionales, que en su mayoría se quedaban la pasada temporada con la miel en los labios al caer contra el Málaga. “Ya viví esto, pero claro que me pongo nervioso. Hay cosas que no se curan con la edad. Nos jugamos que esta ciudad reviva fútbol de Segunda División. Los futbolistas quieren ascender, son los primeros que ganan en prestigio y dinero. Si haces lo que te gusta, ganas dinero y consigues prestigio, no tienes un trabajo, tienes un tesoro. Ellos lo saben y lo van a dar todo por el escudo y por la afición”, claro y directo al corazón.

Fidelidad

Después de 15 años los caminos del Nastic y Luis César se vuelven a encontrar para algo tan bonito como un ascenso de categoría. El presidente ejecutivo del Nàstic, Lluís Fàbregas, y el director deportivo, Javier Sanz, daban la bienvenida a un entrenador que conoce bien la casa. El técnico de Vilagarcía de Arousa se encuentra feliz por estar de nuevo en Tarragona afirmando que “siempre es un honor defender el escudo de este club y entrenar a este equipo”, añadiendo que “para mí es una gran satisfacción volver a estar cerca del Nàstic y sus aficionados… en resumen, lo daré todo para que este equipo logre lo mejor”. Los dirigentes del Nástic no lo dudaron a la hora de llamar a un entrenador fiable y el gallego ya se encuentra en modo ascenso.