Ganar y esperar. La Liga está al rojo vivo y el Almería de Rubi ha llegado a las últimas nueve jornadas del curso 24-25 en el Campeonato Nacional de Liga en Segunda División séptimo de la fila con 53 puntos. Está a solo un punto del sexto (Oviedo) y del quinto (Huesca), pero no depende de sí mismo para subirse al tren del Play Off a Primera División. Quedan 27 puntos en juego por delante. Parecen muchos, pero cuidado porque no son tantos. Los dos meses que quedan se pasan volando.

El calendario del Almería es un ‘comecocos’ y se habla mucho, demasiado tal vez, de que el gran objetivo del ascenso a la Liga de las Estrellas está en los partidos, cinco en total, en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, pero hay que tener mucho cuidado con esas cuentas y es muy peligroso agarrarse solo a las cinco finales en el recinto deportivo de la Vega de Acá.

Quedan dos meses y una semana por delante en la que puede pasar de todo con cinco partidos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos (Cartagena, Racing de Ferrol, Eldense, Racing de Santander y Tenerife).

Mientras, quedan cuatro finales lejos del recinto deportivo de la Vega de Acá. La primera será el próximo sábado, a las 18:30 horas, en el Nuevo Estadio de Los Cármenes ante el Granada. Luego, Castellón, Cádiz y Mirandés.

La hora de la verdad

Hay que dar un golpe en la mesa en el partido de la 34ª jornada en el fútbol de plata para mejorar los números lejos del Estadio de los Juegos Mediterráneos porque con esta dinámica sin ganar a domicilio será casi complicado recuperar una de las plazas de Play Off de ascenso a Primera División.

El equipo rojiblanco de Rubi acumula cinco encuentros sin sumar la victoria fuera de casa, una racha que ha perjudicado al Almería para no meterse entre los seis primeros de la clasificación de la Segunda División. Estos son las cinco partidos seguidos en los que el Almería no ganó lejos del Estadio de los Juegos Mediterráneos: Albacete (2-1), Deportivo de La Coruña (3-1), Sporting (1-1), Eibar (1-0) y Burgos (3-1). Solo un punto de los últimos quince, un balance muy pobre para un aspirante al ascenso a la Liga de las Estrellas. 

El Almería no gana a domicilio desde el 12 de enero cuando goleó (0-3) en el Nuevo Arcángel al Córdoba. Hace más falta que nunca ganar fuera porque el ascenso a Primera División también pasa por vencer fuera. Los partidos en casa son muy importantes, pero también los de fuera.