El Levante es un firme candidato al ascenso y tiene en el banquillo a un entrenador experto que sabe exprimir la calidad de sus hombres y liberarlos de esa presión que genera la lucha por un gran premio. Sabe donde está y lo que quiere, y se ha metido la Primera en la mochila mandando mensajes a sus futbolistas y a los rivales para que tengan claro que de presión nada de nada y van a por la Primera convencidos y con hambre de éxito. Es listo la hora de motivar a los suyos y en cada rueda de prensa deja mensajes para sus directos rivales. “No todo el mundo vale para estar primero en la vida, no todo el mundo vale para ser importante y para liderar algo. Hay que restarle importancia a esa situación, porque si el liderato va a resultar ser una mochila, pues entonces apaga y vámonos”, sentenciaba.

“El liderato lo que te tiene que dar es la confianza de que lo que estás haciendo te funciona, seguridad en lo que haces. Presión sería estar a un punto del descenso o en descenso y estar jugándote la vida día tras día”, dice un Calero que viene de abajo y conoce la categoría de plata donde no hay margen de error, y mejor tener las ideas claras cuando le llega a la recta final de la competición con un gran objetivo por cumplir. El entrenador madrileño sabe que ganando en Almería hacen un partido de 6 puntos y en ello está el equipo granota.

La presión la deja para otros y prefiere un mensaje liberador para sus futbolistas y buscar la victoria como hasta ahora,desde la calidad de unos y la ilusión de otros, ya que tiene una plantilla donde hay edades para todo y un el objetivo común de subir a Primera.

Mensaje

“La madera de los jugadores está ahí. Tenemos un equipo con futbolistas con experiencia, otros con hambre y hay que disfrutar del camino. Si somos capaces de disfrutar del camino es que estamos preparados para ir líderes. Espero y deseo que no tengamos presión”, indicó. Levantando a la tropa como todo buen capitán sabe que cuenta con un equipo al que le piden el máximo sus seguidores y sabe vivir con ello. No es el Levante uno más en la categoría y desde el primer día que aterrizó sabe de las exigencias del banquillo que ocupa. Julián Calero es un entrenador experto que sabe manejar la presión y siempre transmite a su equipo un mensaje de tranquilidad. Ahora todos se juegan algo y sabe bien como manejar su vestuario para que nada del exterior les salpique.

Decisivo

“Cuando llegan los diez últimos partidos es la hora de la verdad. Y la hora de la verdad es la hora de los valientes, pero no de los kamikazes, de los valientes con capacidad para analizar y para, con el conocimiento de juego que tienes, ser mejor que tus rivales. Notaba al equipo mejorando y ahora sí que está más engrasado”, afirmó el entrenador del próximo rival del Almería que vive sus días de gloria con el equipo en el camino de la gloria pero sin margen porque los de arriba no dan un respiro y siguen sumando de tres en tres. La experiencia de Calero es un aval para los objetivos del Levante que se juega mucho con un ascenso a Primera y no solo en lo deportivo ya que la cuenta de resultados económicos necesita de un plus que solo te la da la Primera División.