Si para el Almería subir a Primera es la solución a muchos de sus problemas económicos, otros grandes clubes como el Levante también se ven en la necesidad de dar el salto para paliar una situación económica que empieza a salpicar a diferentes secciones del club. Hace unos días era el director deportivo Felipe Miñambres el que anunciaba que no seguía en la entidad al no aceptar un importante recorte económico. Miembros del departamento técnico también se han visto afectados por los recortes que genera una situación de ahogo económico. El Levante se encuentra en una situación económica muy delicada y ha despedido a una decena de empleados

La serie de despedidos arrancó a mediados de la semana pasada, con la salida del club del hasta entonces director deportivo, Felipe Miñambres, tras no aceptar una reducción de salario. Con él también se marchó Ángel Medina, el ayudante de Felipe en la dirección deportiva, y el Levante prescindió, además y también por cuestiones económicas del segundo entrenador del primer equipo, Antonio Carmona. El club no vive un buen momento económico y por lo menos en el apartado deportivo ha llegado una reacción que ha devuelto a plaza de Play Off a los azulgrana.

Lo que está sucediendo en el Levante a nivel social no ha trascendido en lo deportivo porque todo va controlado gracias a la experiencia de un Julián Calero que esta blindando a sus jugadores para que solo piensen en ganar partidos y se alejen del ruido económico.

Despidos

Según informa la agencia EFE “Entre el viernes pasado y el lunes de la presente semana, el Levante comunicó a una decena de trabajadores de distintos departamentos de la entidad su despedido. Alguno de ellos, como dos empleados del departamento de estrategia digital, confirmaron su salida del club en sus cuentas de redes sociales. Estos despidos se unen a los que el Levante ha realizado desde el pasado verano de 2023, cuando el equipo se quedó a las puertas del ascenso a Primera División y se produjo el relevo en la presidencia del club, tras la salida de Quico Catalán y la llegada de Pablo Sánchez como presidente”.

Cuentas

“El consejero delegado y máximo accionista del Levante, Pepe Danvila, aseguraba el pasado verano, en la última junta, que al “95 por ciento” el resultado económico del curso 23-24 sería positivo, las previsiones que maneja ahora el club no son las mismas, aunque todavía no está convocada la junta de accionistas que debe celebrarse durante el mes de abril”, cita la agencia EFE que proyecta una situación económica preocupante en el club granota con los despidos y los recortes a la orden del día y el equipo afrontando la recta final de la temporada con el ascenso a Primera División en el punto de mira. Subir es un alivio económico para los clubes de Segunda y en la tarea se encuentra un equipo que no parece afectado por la situación a tenor de los resultados y la buena racha de marcadores que le colocan en el camino del ascenso.