A sus 73 años, la inolvidable Bombi del mítico concurso ‘Un, dos, tres… responda otra vez’, atraviesa el momento más duro de su vida. La actriz y humorista Fedra Lorente, muy querida por el público que la vio brillar en la televisión de los años 80 y 90, se enfrenta a una situación dramática tras la repentina muerte de su marido, el cantante Miguel Morales, integrante del legendario grupo Los Brincos. El músico falleció el pasado mes de septiembre, dejando tras de sí un importante vacío emocional y, para sorpresa de su familia, también una complicada situación económica.

Tal y como ha desvelado esta semana la revista Semana, Fedra y su hija adoptiva, Álex Morales, descubrieron al acceder a las cuentas del artista que la herencia que dejaba Miguel eran únicamente deudas. “Mi primo Antonio me está ayudando mucho con todos los papeles y la documentación. Me dijo que él había pasado dos veces por eso y va un paso por delante”, ha dicho Álex.

Según han explicado ambas en la entrevista, durante las semanas posteriores al fallecimiento no pudieron acceder a las cuentas del cantante, por lo que tuvieron que pedir ayuda a sus sobrinos —los hijos de Junior y Rocío Dúrcal— para poder pagar los gastos del entierro. Una vez obtuvieron autorización judicial, la sorpresa fue mayúscula: las cuentas estaban vacías. Morales habría sido víctima de una estafa que le hizo perder todo su patrimonio y le generó deudas que ahora su familia debe afrontar.

La situación es tan crítica que Fedra Lorente y su hija se han visto obligadas a vender parte de sus pertenencias personales y a recurrir a organizaciones benéficas como Cáritas para poder comer y cubrir necesidades básicas.

Visiblemente afectada, la actriz relató también cómo fueron las últimas horas de vida de su marido: "Tenía un dolor muy fuerte de estómago pero no quiso ir al médico por no cancelar un concierto. Resulta que tenía todo muy mal, la bilirrubina, las transaminasas...", explicó. "Lo encontré muerto en la cama y me metí con él debajo de la sábana. Le regañé por habernos dejado tan solas. Estuve media hora hablando con él, dándole besos".

Una historia tan triste como inesperada que recuerda la vulnerabilidad incluso de los rostros más populares de la televisión española.