La ruptura entre Kiko Rivera e Irene Rosales sigue generando titulares. El anuncio se produjo el miércoles 27 de agosto y, poco después, tanto el DJ como la influencer confirmaron oficialmente su separación con dos comunicados en sus redes sociales. Ponían así punto final a once años de relación y a su matrimonio, del que nacieron sus dos hijas, Ana y Carlota.

Aunque en un primer momento se señaló que la separación se había producido de manera amistosa y sin terceras personas, ahora ha trascendido que Kiko Rivera habría mantenido un romance con una joven llamada Laura, muy parecida físicamente a Shakira, con la que “se comportaba como si fuesen pareja”. Este vínculo, según el periodista Saúl Ortiz, se habría dado cuando él ya estaba casado con Irene.

El día que Irene Rosales dijo "hasta aquí"

La decisión de romper definitivamente la tomó Irene Rosales tras lo ocurrido en la comunión de su hija Ana. El periodista Ricky García explicó que fue ella quien puso fin a la relación tras lo sucedido el pasado 1 de junio. En sus palabras: “Yo estoy hablando con una persona muy cercana, me dicen que ese momento, en el que se celebra la comunión, pasa algo, Kiko desaparece y es el punto de inflexión en el que se toma la decisión de separarse y la decisión la toma Irene”.

Saúl Ortiz añadió más detalles: “La decisión la toma Irene. Las últimas 3 ó 4 semanas han sido muy complicadas, muy terribles y hay una convivencia muy difícil. Ella lo verbaliza a su círculo más íntimo y se refugia en ello y toma la decisión de poner fin a la historia”.

Una amante en Nueva York

En el programa Fiesta también se reveló el testimonio de un testigo de la supuesta relación de Kiko Rivera con otra mujer” Esta fuente, que aseguró ser muy cercana al DJ, afirmó: “Kiko la conoció en 2018 y comenzaron una relación sentimental que ha durado varios años. Mantenían una relación normal como una pareja de enamorados. Cuando se han visto, han hecho las cosas que hacen las parejas. Se conocieron en Nueva York, a partir de ese momento han mantenido una relación sostenida en el tiempo, han quedado en varias ocasiones y han seguido de forma online”.

El testigo continuó: “A él le gustó, en cuanto la vio. Él decía que era igual que Shakira. Ella sabía quién era Kiko Rivera en España y que estaba casado”.

El propio Saúl Ortiz corroboró lo sucedido: “A ver, yo os voy a contar lo que yo viví en el año 2018 que estuve en Nueva York. Kiko Rivera debuta en Nueva York como DJ, es una fiesta que hace para españoles, y me voy a cubrir eso allí. Mi relación con Kiko entonces era muy estrecha y cuando llego allí, me encuentro a Kiko en compañía de una chica que se llama Laura, que es guapísima, con la que él hace vida normal los días que estamos allí”.

Cuando Terelu Campos le preguntó qué quería decir con “vida normal”, Ortiz aclaró: “Vida normal es cogidos de la mano. Vamos a desayunar, a comer, a cenar juntos... Kiko ahí estaba casado con Irene”.

Pacto de silencio

Según Ortiz, quienes estaban presentes en aquella ocasión hicieron un pacto de silencio: “En ese momento, todo el mundo lo vio porque era una fiesta de españoles en Nueva York, en un ático maravilloso donde triunfó, y a mí me daba mucho apuro porque, en aquel momento, es verdad que hicimos una especie de pacto las personas que estábamos ahí para proteger a Kiko de esa situación pero eso fue así”.

Finalmente, concluyó: “Kiko Rivera tenía o tuvo un escarceo con esa chica, Laura, con la que yo tengo relación a través de las redes sociales porque en ese momento nos seguimos”.

Cuando Terelu le preguntó si alguien había informado a Irene, Ortiz respondió que no era amigo suyo y que, de hecho, el propio representante de Kiko, Fran Sánchez Simón, “es íntimo de Kiko y también de Irene” y tampoco dijo nada. A lo que Terelu apuntó: “Fran también ha sido la tapadera para muchas cosas”. En esa línea, recordó lo dicho por Gema López en Espejo Público: “La relación de Kiko con su representante, Fran, también habría podido pasar factura a la pareja. Fran ha ayudado en muchas cosas a Kiko pero también se ha convertido en tapadera de muchas cosas de Kiko. Esto Irene llegó un momento que no lo quiso aguantar. Hasta el punto de que se había enterado de ciertos cobros, ciertos bolos que no cuadraban pero Kiko, una vez más, habría salido en defensa de Fran”.