El número de alojamientos turísticos en Adra se ha incrementado sustancialmente durante el último año y acumula un crecimiento de más del 30%. En total suman ya 95 alojamientos turísticos según consta en los registros oficiales de la Junta de Andalucía, una modalidad de hospedaje que sigue al alza en la localidad y cuenta ya con capacidad para acoger a 562 visitantes.

El crecimiento de este tipo de alojamientos turísticos en la ciudad se ha visto incentivado gracias a la bonificación, en un 95% del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las viviendas destinadas a uso turístico promovida por el Ayuntamiento de Adra. En este sentido, el último pleno de la Corporación Municipal ha acordado esta bonificación a un nuevo establecimiento con capacidad para 4 personas. Un acuerdo que se ha aprobado por unanimidad, a excepción de la abstención de VOX.

De esta manera, junto con los establecimientos turísticos que se benefician de esta reducción del IBI, el crecimiento del sector en Adra resulta especialmente significativo. Hace apenas un año, en noviembre de 2024, el municipio contaba con un total de 71 alojamientos turísticos, con capacidad para hospedar a 436 visitantes. Desde entonces, el número de establecimientos ha aumentado hasta 95, y la capacidad total se ha elevado a 562 plazas, lo que representa un incremento de más del 30% tanto en el número de alojamientos como en la capacidad de recepción de turistas.

Este crecimiento refleja no solo la efectividad de las políticas de incentivos municipales, como la bonificación del IBI para viviendas destinadas a uso turístico, sino también el interés creciente de inversores y emprendedores en aprovechar el potencial turístico de la ciudad. Gracias a estas medidas, Adra se consolida como un destino cada vez más atractivo y competitivo dentro de la provincia, contribuyendo al desarrollo económico local y ofreciendo a los visitantes una mayor diversidad de opciones para su estancia.

Solicitud de la bonificación

Cabe recordar que la solicitud y los trámites para convertir una vivienda en un alojamiento turístico han de realizarse a través del registro oficial de la Junta de Andalucía. Una vez la entidad autonómica otorga a la vivienda esa nueva denominación, el propietario deberá acudir al Ayuntamiento para solicitar y recibir la bonificación correspondiente del IBI. Una bonificación de la que disfrutarán durante el periodo máximo de diez años desde la solicitud.

Las viviendas con fines turísticos son aquellos inmuebles cuya ubicación está en suelo de uso residencial y se ofrecen como servicio de alojamiento con fines turísticos de forma habitual y mediante precio. Por su lado, las viviendas turísticas de alojamiento rural son aquellas situadas en el medio rural en las que se preste el servicio de alojamiento, y que son ofertadas al público con fines turísticos, una o más veces a lo largo del año.