No deja de ser destacable que un un organismo perteneciente de la Junta de Andalucía, el Observatorio Andaluz de las Migraciones, alerte sobre el peligro de la actual tendencia negativa de la opinión pública sobre la inmigración.

“Hay una difusión cada vez mayor de percepciones de agravio comparativo; es decir, percepciones de perjuicios que la inmigración estaría causando a personas autóctonas. De seguir sus actuales tendencias, vemos el riesgo de que a medio plazo, la calidad de la convivencia podría verse afectada”, se indica en el informe.

De hecho, mientras que este sondeo tenía una frecuencia más dilatada en el tiempo, ya que se llevó a cabo en los año 2005, 2008 y 2010. Se ha decidido extremar la vigilancia y este año y el próximo también se realizarán encuestas. No obstante, el riesgo, aseguran, “aún es remoto”, aunque inciden en que “desde principios de 2008 hasta principios de 2011 la valoración del hecho migratorio ha dado un vuelco considerable”, ya que de reconocer la necesidad de mano de obra inmigrante y su aportación al desarrollo económico, la ciudadanía ha pasado a considerar mayoritariamente que el balance de efectos de la inmigración para la sociedad es desfavorable.

Más información en la edición impresa de hoy, 18 de agosto.