Los concejales Mari Paz Bonet, Alonso Soler, Isabel Paredes y Bernardo Simón presentaron ayer por la mañana su dimisión irrevocable del Gobierno municipal del Ayuntamiento de Garrucha y anuncian su salida del Grupo Popular, pasando a ser concejales no adscritos, por lo que el actual Alcalde gobernará en minoría a partir de ahora. Asimismo, agradecen a los vecinos el apoyo que han venido recibiendo.
Según el grupo de concejales, esta decisión está motivada por discrepancias en el funcionamiento como equipo del Gobierno bajo la dirección del alcalde, Juan Francisco Fernández, en cuanto a la organización, método de trabajo y establecimiento de prioridades a lo largo del mandato. También denuncian “formas antidemocráticas de la Dirección provincial del Partido Popular de Almería”, que se limitó a dejar que esta situación se fuera agravando y al final han impuesto al candidato del partido para las próximas elecciones municipales sin haber querido contar con la opinión de la Junta Ejecutiva ni de los militantes.
Estos concejales renuncian a sus respectivas delegaciones de área, así como a  sus despachos, teléfonos móviles y sueldos, y sugieren al Alcalde que dedique ese mismo sueldo que dejan de percibir a la deuda que tiene con los monitores de las escuelas deportivas de fútbol y baloncesto, que llevan ya demasiado tiempo sin cobrar.