El pádel ha dejado de ser una moda pasajera en la provincia de Almería para consolidarse como uno de los deportes con mayor proyección. Más de 28.200 almerienses lo practican al menos una vez al mes (20.200 hombres y 8.000 mujeres), según datos del Ministerio de Cultura y Deporte. Si se suman quienes lo practican de forma esporádica, la cifra asciende a más de 54.100 almerienses que se acercan a una pista de pádel al menos una vez al año.

Este crecimiento se palpa en el ambiente de los clubes, en el número de escuelas, en la organización de torneos y en el interés social. Rubén Sánchez, nuevo gerente del Club de Pádel Indoor El Ejido y actual seleccionador absoluto de la provincia, lo vive desde dentro: “Lleva creciendo unos siete u ocho años, pero con la pandemia pegó un crecimiento importante. Al ser un deporte sin tanto contacto, mucha gente lo probó, y claro, con poco que juegues, te engancha”.

Un fenómeno en auge

Sánchez gestiona junto a su compañero Francis Calvache la Level Pádel Academy, con una lista de espera de 150 personas. “Es una locura. Aquí, ahora mismo, a nivel de iniciación y amateur, el pádel es un boom”. Su club cuenta con ocho pistas y un tráfico constante de jugadores.

En Almería capital, Raúl López dirige junto a su hermano el Propadel Indoor Club, un negocio familiar que recibe diariamente a más de cien personas. “Tenemos una escuela con 80 niños, y una liga privada con 130 parejas que compiten desde octubre hasta junio. Es un deporte que ha calado fuerte”, señala.

La cantera, clave para el futuro

Ambos coinciden en que el crecimiento real del pádel almeriense pasa por la base. “Ese es mi principal objetivo”, dice Sánchez. “Los niños empiezan cada vez antes, con siete, ocho o nueve años. Y cuanto antes empiezan, más nivel cogen. Si queremos subir el nivel de la provincia, el trabajo con los menores es fundamental”.

En ese sentido, López añade: “Cuando llegan a los 15 o 16 años, ya hay chicos de 18 con mucho nivel. Eso antes era complicado. El interés de los jóvenes ha crecido mucho”.

Mujeres en pista: lento pero constante avance

Otro de los focos de desarrollo está en el ámbito femenino. Sánchez reconoce que todavía hay barreras: “Hay muchas niñas que lo dejan porque no tienen con quién jugar. Si no hay más niñas de su edad, no pueden montar partidos. Nosotros estamos centrando nuestros esfuerzos en cambiar eso. Está creciendo, sí, pero todavía hay más hombres que mujeres”.

"Es un deporte practicado por mujeres, pero sigue habiendo mayoría de hombres"

López también observa ese desequilibrio: “Es un deporte practicado por mujeres, pero sigue habiendo mayoría de hombres. Aun así, vemos muchas parejas mixtas, incluso matrimonios que vienen a jugar juntos. Eso es positivo y ayuda a crear comunidad”.

El papel del circuito profesional

La visibilidad del pádel profesional también está influyendo. Sánchez lo tiene claro: “Antes no veías a nadie con una camiseta de Paquito Navarro. Ahora ves camisetas de Chingotto o de Galán por el club. La gente se ha enganchado también desde ahí y el hecho de que sea más fácil acceder a los partidos ayuda a que el circuito sea más conocido”.

Raúl López apunta que hay distintos perfiles de jugadores: “Algunos vienen solo a jugar su pachanga y se van. Pero hay otros que están muy metidos, saben quiénes son las mejores parejas y siguen el circuito profesional con interés”.

El nivel en la provincia y su comparación con otras

A nivel competitivo, Almería aún tiene camino por recorrer. “En los campeonatos por selecciones absolutas hemos quedado séptimos de Andalucía en las últimas dos ocasiones”, comenta Sánchez. “Málaga, Sevilla, Córdoba o Granada tienen más nivel, pero también más volumen de jugadores. Nosotros estamos en ese proceso de mejora”.

López, en la misma línea, reconoce que “cuando los jugadores salen a competir fuera, notan que en otras provincias hay mucho más nivel. Aquí hay pocos jugadores todavía si comparamos con Granada o Málaga”.

Para todos

Uno de los factores del éxito del pádel es su accesibilidad. “No hace falta tener un físico privilegiado”, destaca Sánchez. “Con un poco de técnica ya puedes devolver bolas y disfrutar. Y luego está el componente social, que es muy importante. Juegas, te diviertes y luego te tomas algo con los amigos. Eso engancha”.

"La evolución es rápida y eso motiva”

López refuerza la idea: “Solo necesitas cuatro personas. Hay quienes prefieren jugar siempre con la misma pareja. Otros entran a través de la app, se apuntan a partidos abiertos y en poco tiempo están jugando dos o tres veces por semana. La evolución es rápida y eso motiva”.

Un futuro prometedor

Ambos gerentes están convencidos de que el pádel en Almería aún no ha tocado techo. Sánchez ya prepara el torneo de inauguración de su gerencia, previsto para la segunda semana de junio: “Queremos que la gente vea un pádel de nivel, vendrá gente muy buena. Será un torneo con todas las categorías, abierto a todo el mundo”.

Con iniciativas como esta, escuelas repletas y un creciente interés social y mediático, el pádel almeriense avanza hacia un futuro prometedor. El reto: consolidar su base, mejorar su nivel competitivo y lograr una mayor igualdad entre hombres y mujeres en pista. El camino está trazado.