La misma ladera que el pasado mes de noviembre obligó al desalojo de unas 10 familias de Zurgena tras varios desprendimientos de tierra acaecidos a lo largo de varios días, ha vuelto a enterrar las esperanzas de unos 17 vecinos de esta localidad, que ya veían cerca la posibilidad de volver a sus casas tras los trabajos realizados en el cerro de Las Lomas.

De nuevo, parte de este cerro situado junto a la céntrica Avenida 10 de Octubre se ha vuelto a venir abajo con tres derrumbes durante los últimos días. El domingo y el martes montones de tierra volvieron a caer junto a las viviendas y negocios desalojados el pasado 19 de noviembre. Desde entonces se venían realizando trabajos por valor de más de 320.000 euros centrados en el escalonamiento de la ladera y la realización de bermas, algo que sin embargo no ha evitado nuevos derrumbes.

Con las obras finalizadas
Todo estaba a punto para que las familias pudieran volver a sus hogares. Los trabajos de contención del cerro habían finalizado el 18 de febrero, pero los técnicos solicitaron a las empresas encargadas de las obras unas terminaciones para dotar de mayor seguridad aún a la obra. Antes de que se pudiera llevar a cabo el hormigonamiento solicitado y la colocación de una malla para evitar pequeños desprendimientos, parte del cerro se ha vuelto a venir abajo.

La humedad del cerro es una de las principales causas de estos movimientos de tierra. Una humedad agudizada por las lluvias de los últimos días. Aún así, el alcalde de la localidad, Francisco Ramos, ha explicado que “los técnicos han estudiado los desprendimientos y no encuentran explicación a por qué llega la humedad ahí arriba. Los trabajos estaban perfectamente hechos”, subraya. Una vez más, a las familias desalojadas les toca esperar la llegada en las próximas horas de un nuevo informe geológico.

La mayoría de estas diez familias están habitando en pisos con el alquiler a cargo del Consistorio zurgenero. Dos de ellas se encuentran en casa de familiares. “Lo que más nos preocupa es que cuanto antes puedan volver a sus viviendas”, enfatiza el alcalde.

Dos negocios con las puertas cerradas

Con los primeros derrumbes  del cerro de Las Lomas no sólo fueron desalojadas diez familias. También dos negocios se vieron obligados a echar el candado y cerrar su local tras los derrumbes de tierra. Tras casi cuatro meses desde los primeros desprendimientos, el malestar y la impotencia de quienes regentaban estos negocios está más que presente en la localidad y también en las redes sociales.

“El comercio ha sido gravemente dañado. Los propietarios de estas dos empresas han invertido una cantidad considerable. Un pueblo debe acoger y apoyar esta actividad. Lamentablemente, esto no parece ser”, espeta al Consistorio uno de los afectados en un perfil del Ayuntamiento zurgenero presente en la red. Tras los últimos desprendimientos, el drama continúa.