Vera vive su particular noche de miedo
El pasaje del terror denominado “el Convento de los Malditos” fue la gran atracción

Los más pequeños disfrutaron a lo grande de la fiesta.
El municipio de Vera ha sido una de las localidades con más actividades y ambientación de todo el Levante en la celebración de la víspera del Día de Todos los Santos más conocida como noche de “Halloween” celebrada ayer, y es que la amplia programación puesta en marcha por la concejalía de Comercio, Juventud e Infancia del Ayuntamiento veratense ha contado con una gran participación de vecinos y visitantes que han abarrotado las calles de la localidad.
El intenso y variado repertorio de actividades dio comienzo a las seis de la tarde en la Plaza Mayor, con actividades dirigidas a los más pequeños. Animación infantil, concursos de disfraces, hinchables, pintacaras, pasacalles y un sin fin de actividades hicieron las delicias de los cientos de niños y familiares que llenaron de diversión y el mejor ambiente familiar las calles del municipio.
Según la concejal de Comercio, Juventud e Infancia, Ana Lourdes Ramírez “con esta extensa programación hemos intentado además de ofrecer una alternativa de ocio y diversión a nuestros vecinos, dinamizar el comercio e incentivar el consumo en los establecimientos veratenses”. En este sentido Ramírez indicó que “incluso hemos decidido que los premios del concurso de disfraces infantiles sean cheques canjeables en las jugueterías del pueblo como muestra de apoyo al pequeño comercio veratense”.
Pero sin duda el plato fuerte de la velada fue “El Convento de los Malditos”, un pasaje de terror ubicado en el Convento de la Victoria de la localidad, que de forma totalmente gratuita ha hecho las delicias de los cientos de vecinos que se han acercado para realizar un recorrido por situaciones de terror, llenas de personajes fantasmavólicos, donde la música de piano en directo junto a efectos sonoros y lumínicos han conseguido recrear una ambientación de lo más sobrecogedor.
Desde las ocho de la tarde que se abrieron las puertas hasta pasadas las doce de la madrugada las colas han sido incesantes para acceder a este novedoso pasaje del terror, en el que han colaborado de forma totalmente desinteresada numerosos vecinos así como la Asociación para la Promoción de las Personas con Discapacidad Intelectual del Levante Almeriense (Asprodalba)