Cinco años después de que la LOE contemplara la enseñanza religiosa evangélica, la Junta la establece como “de oferta obligatoria” en los centros docentes sostenidos con fondos públicos, tanto públicos como concertados, desde infantil a bachillerato. La Junta responde así al convenio que firmó con el Consejo Evangélico Autonómico (CEAA) el 23 de noviembre, publicado en el BOJA el pasado 28 de marzo.

En él se afirma que la Consejería de Educación “adoptará las medidas necesarias para garantizar al alumnado, a sus padres, madres o tutores legales que lo soliciten, en coherencia con sus convicciones, el derecho de los primeros a recibir enseñanzas de Religión Evangélica”. Eso sí, especifica que en el caso de los centros concertados, la enseñanza se ofertará “siempre que el ejercicio de tal derecho no entre en conflicto con el carácter propio del centro, que tendrá que ser comunicado por el titular”, en referencia a los centos sostenidos por fondos públicos pero gestionados por instituciones católicas.

La medida comenzará ya el próximo curso y se ofertará “en un impreso que será el mismo para todas las opciones religiosas”. Se solventa así una reivindicación de la comunidad protestante, que hasta ahora sólo había podido atender un 23% de los centros almerienses en los que se había demandado la asignatura.

Según un estudio realizado por Jesús Martínez y Carlos Bloise, los dos únicos profesores que imparten Religión Evangélica en Almería, actualmente se acude a siete colegios, tres en la capital y cuatro en Roquetas, a pesar de que otros 17 han solicitado sus clases. Los datos podrían ser superiores ya que muchos centros ni siquiera aportaron el curso pasado datos sobre la demanda o no de la materia. Así, cerca de un centenar de alumnos que requirieron clase de Religión Evangélica quedaron sin atender.

La razón apunta a la falta de contratación de los profesores, que ahora la Junta se ha comprometido a resolver. Además de los dos docentes, cinco profesores poseen la formación específica para esta enseñanza en Almería. El convenio sostiene en este sentido que será la Junta la que los contratará, a diferencia de la Religión Católica, cuyos docentes dependen del Ministerio, “y formarán parte, a todos los efectos, del Claustro de Profesores de los respectivos centros”, si bien serán propuestos por los Consejos Provinciales de la Consejería de Educación del CEAA. Además, se contempla la figura del profesor de Religión Evangélica con función asesora que formará parte de un Centro de Profesorado.