Los alérgicos al ciprés en Almería han vivido esta semana pasada uno de los picos más altos de polen en lo que va de año. Así lo reflejan los datos recogidos por el recolector de pólenes de la Sociedad Andaluza de Alergología y por las consultas de quienes, afectados por rinoconjuntivitis, han acudido a los especialistas.

Y es que, la mayoría de quienes se saben alérgicos a este polen pensaban ya que esta temporada se libraban porque el pico de ciprés se ha retrasado hasta un mes respecto del año anterior. Así lo explica el alergólogo Juan José Zapata, que se encarga de registrar semanalmente, los niveles de pólenes en Almería.

Alergia ‘de proximidad’

Reconoce que la falta de lluvias en otoño e invierno hace prever una primavera “suave” para los alérgicos al polen. No obstante, este especialista apuesta por lo que llama “alergia de proximidad”, que no es otra cosa que la exposición individualizada a un entorno determinado. “Puede ocurrir que apenas haya niveles de pólenes de ciprés en la atmósfera, pero que un alérgico viva en una urbanización rodeado de cipreses, utilizados como cortavientos, por ejemplo.

Sin bajar la guardia

Ante esta situación, cada vez más común por la generalización de repoblaciones, un alérgico no puede “fiarse” de las estimaciones generalistas para un período de tiempo determinado, dice Zapata, que recomienda “no bajar la guardia”. Recomienda a los alérgicos al polen que “tomen la misma medicación que se les prescribió la primavera pasada, que observen los registros de polen en la ciudad y que consulten al especialista, en caso de agravamiento de la situación”. Precisamente, para ayudar a los pacientes a “sobrellevar” mejor la primavera, la página web www.polenes.es permite, gratuitamente, conocer la evolución de los diferentes pólenes en el aire almeriense. “Es una herramienta que ofrece al alérgico una visión de lo que pasa en el ambiente. Así puede reaccionar mejor”.

Además, siempre se puede uno vacunar, insiste.