Estimados director y estimados paisanos almerienses. Ayer fui testigo de como unos obreros realizaban vertidos de escombros en el contenedor amarillo para envases. Después de la última normativa sobre residuos con su correspondiente anuncio de cuantiosas multas avisé a la policía municipal sobre este incumplimiento de la normativa del ayuntamiento. La policía municipal tuvo a bien no personarse, lo cuál puede parecer nimio, pero me hace plantearme distintas preguntas. ¿Esa normativa solo tiene interés en multar al ciudadano corriente? ¿Los residuos de los contenedores amarillos son debidamente procesados para su reciclaje? ¿Cumple la empresa concesionaria su obligación respecto al tratamiento de residuos? ¿Cumple el ayuntamiento con la normativa autonómica, estatal y europea? ¿Todo esto del reciclaje es un paripé para quedar bien? En realidad todo esto no es difícil de investigar por un ciudadano corriente y siempre he tenido la impresión de que los residuos en nuestra amada ciudad no son tratados convenientemente. Pero a mi me queda claro que no merece la pena convencer a mis padres, ya mayores, sobre la conveniencia del pre-reciclado en casa. He estado en otros países y hay una absoluta transparencia sobre la cantidad y clase de residuos reciclados y se anuncia a la ciudadanía correspondientemente. No me voy a engañar más, Almería, en muchos aspectos está a la cola de Europa.