La falacia del doble corredor mediterráneo
“Éramos pocos y parió la abuela”. Y no porque sea almeriense, incluso modesto precursor del corredor mediterráneo, que las autoridades europeas dejaban en Murcia allá por la década de los ochenta. Lo dicen en la Comunidad Valenciana, donde actualmente resido (y doy fe de las quejas de los medios de comunicación), lo dice el sentido común, lo diría mi abuela que en paz descanse y lo digo yo, porque me da la gana. ¡Andalucía continúa tomando el pelo a los almerienses con el Corredor Mediterráneo! ¡Ya está bien! ¿Cuándo algo que beneficie a Almería será tomado en cuenta por la Junta de Andalucía y no como una competencia con los intereses económicos del resto de la comunidad autónoma? Conseguimos la conexión de Almería con el resto del Levante peninsular (y Europa), vía férrea, con una línea de altas prestaciones. Pudimos incluir esa línea en la Red Transeuropea de Transportes, uniendo centroeuropea con todo el arco mediterráneo, pasando por Almería, para continuar hasta Algeciras. Lo lógico, lo racional, lo más competitivo, rentable y eficiente. Porque estamos hablando de más de la mitad del PIB español y cuatro de los puertos más importantes del mundo: Algeciras, Valencia, Barcelona y Marsella, entre otras muchas razones de tanto peso, o más (por ejemplo, que Almería abastece de frutas y hortalizas a media Europa en invierno –y no en sentido figurado, ni exagerando–). ¿Y la Junta de Andalucía?... pues erre que erre: que es prioritario el “ramal central” del corredor. Es decir, una de las invenciones más absurdas, a medida de políticos centralistas de Sevilla, porque a Madrid, la verdad –creo yo–, le viene al pairo ese ramal central, aunque pretendan unir prioritariamente la capital de España con Algeciras, para después dirigirse al auténtico corredor mediterráneo, o adentrarse por los Pirineos hasta Francia. Y Algeciras, ni te cuento: ¿les viene mejor estar conectados con la nada del interior peninsular, o con las sinergias mercantiles y económicas del auténtico arco mediterráneo –sí, el ubicado en la costa mediterránea, desde Gibraltar hasta la Padania italiana). El que lo analice no reirá, más bien llorará por la flagrante injusticia histórica padecida en la ribera mediterránea para favorecer intereses centralistas (parisinos, madrileños, o sevillanos qué más da). El caso es joder. Y en este caso “Andalucía jode a los almerienses una vez más”. En palabras del consejero de Fomento de la Junta de Andalucía, Felipe López, infiltrado en las reuniones en defensa del corredor mediterráneo, es necesaria la inminente intervención en “el ramal Algeciras-Bobadilla-Linares-Baeza-Madrid-Zaragoza y de ahí a la frontera”, básicamente porque según él ese ramal “es prioritario tenerlo concluido antes de 2020 y al ritmo que se va no se llega de ninguna de las maneras”, aparte de que cuesta quinientos millones de euros menos (según sus estimaciones) que el ramal (el auténtico corredor) litoral (el que pasa por Almería). “Ministro, hazlo todo, el ramal litoral, el central, lo que te dé la gana, pero es menos caro y tardarás menos tiempo si dejas el tramo litoral (el auténtico corredor mediterráneo) en detrimento de la conexión de Algeciras con Madrid por el interior. Y ya habrá tiempo en 2030, 2040, 2050, o lo que te venga en gana y puedas excusar de llegar hasta Almería, para conectar desde ahí con el resto del Levante”… Dirá nuestro ilustre consejero, creo yo… ¿O me equivoco? ¿De verdad Andalucía defiende los intereses de Almería?... Que venga Dios y lo vea.