Juan López Rodríguez
A mi padre
Honesto, humilde, generoso y desinteresado. Como esposo, padre y abuelo, insuperable. Así era él, un ser especial. Seis años han pasado ya sin que estés entre nosotros; un tiempo que, desgraciadamente, ha dado para que muchos momentos importantes no hayamos podido disfrutarlos junto a ti. Tus nietos, Miguel Ángel y María, ya han hecho la primera comunión; y Noelia y Dani se han casado, algo que te hubiera llenado de orgullo. Además, ha llegado a la familia alguien que lleva tu nombre. Un pequeño “diablo” que ha traído la alegría a la casa y con el que hubieses disfrutado como nadie. No es otro que tu nieto “Juanito”. No sé dónde estarás, pero estoy convencida que en el lugar privilegiado que te mereces. Aunque nada sea igual sin ti, mi corazón sigue latiendo porque eres tú quien está dentro. Cuánto te añoro, cuánto te necesito. Te quiero mucho papá.