La Voz de Almeria

Obituarios

Don Mateo Caparrós (Mateo del Provenzal)

Dedicatoria de unos vecinos a una familia humilde y trabajadora

Pedro Javier Montoya

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Hace ya muchos años llegó de Francia una familia humilde y trabajadora, la familia Caparros, yo ni siquiera andaba por esta tierra o era demasiado pequeño, aunque me cuentan los viejos del lugar, que llegó con una camioneta, una hormigonera y una pala con el mango muy largo, nunca vista por estos lugares; compró un trozo de tierra en la playa para hacer un hotel, creían que estaba loco, pero como todo lo que se propuso en su vida, lo consiguió, logró ver hecho realidad su sueño. El buen trabajo Él y su mujer, con sus manos, poca maquinaria y ayudado puntualmente para los trabajos más pesados, hicieron un edificio de tres plantas, con un bonito restaurante y dos plantas de habitaciones, EL HOTEL PROVENZAL. Ya quisieran hoy las mejores máquinas, tener la perfección de tal inmueble, hecho a conciencia, que ha servido y sirve para el sustento de su familia. Sus hijos, Mateo, María Ángeles y Cristina, crecieron, se casaron y son, al igual que sus descendientes, unos mojaqueros más, bondadosos y educados, valores heredados de sus padres. No puedo obviar a Madame Caparros, (así la conocemos), madre de la familia Caparrós y pilar fundamental, por cierto hace el mejor paté casero de España, tapa favorita del Provenzal. Mateo, fuerte de carácter pero noble de espíritu, siempre tuvo el coraje suficiente para afrontar nuevos retos. Cuando se jubiló trasladó su domicilio al barrio de la Rumina, en una casa frente al mar, donde pasar el resto de sus días, cerca de sus nietas, disfrutando de su barco que era una de sus aficiones, aún jubilado y hasta hace pocos días, seguía muy activo, pintando, haciendo bricolaje, cortando leña en los inviernos, fuerte como siempre ha sido, con su inseparable compañera, su esposa. La amistad Ha sido mi vecino 20 años y muchas navidades hemos compartido una copa de vino de su bodega tío Mateo. Dejas un vacío muy grande en el barrio y en el Provenzal, que siempre será tuyo porque se hizo con tus manos. Que descanses como tú te mereces y como cuenta tu mujer que naciste, entre algodones, calentito como tu madre te trajo al mundo.Hoy no vas a leer la prensa como hacías todos los días, pero eres el protagonista, porque esta es y será tu tierra, donde hoy descansan para siempre tu cuerpo y tu alma, se ha marchado papé. Un fuerte abrazo a toda su familia. Tus vecinos de Calle Esquimo y del Barrio de la Rumina.

tracking