Regreso a la Nueva York de los Artero

‘Objetivos cruzados’ reúne imágenes realizadas por José María, fundador del Grupo AFAL, y por su nieto Chema, fotoperiodista, con cuaren

Imagen de Nueva York tomada en 1973 por José María Artero.
Imagen de Nueva York tomada en 1973 por José María Artero.
Evaristo Martínez
23:53 • 07 sept. 2016

“Él adoraba la ciudad de Nueva York. La idolatraba fuera de toda proporción. No, digamos que la romantizaba fuera de toda proporción. Mejor. Para él, sin importar qué estación era, ésta aún era una ciudad que existía en blanco y negro, y que latía al son de las melodías de George Gershwin”. No es nada original comenzar un artículo sobre Nueva York citando el comienzo de ‘Manhattan’ pero a la ciudad -perdón, LA ciudad- más cinematográfica del universo no tiene mejor presentación. Porque, además, seis años antes de que Woody Allen escribiera aquellas líneas de guion, un almeriense llamado José María Artero (1921-1991) supo besar el alma de los rascacielos y acariciar la piel de las aceras con su cámara de fotos. Como si en su cabeza sonara ‘Rhapsody in blue’ y supiera que el blanco y negro sería el color eterno del gigante de asfalto.




El resultado de aquel viaje realizado junto a su esposa e hijos en las navidades de 1972/73 pudo verse en la sala de arte Cajal (en la librería del mismo nombre, que el intelectual había fundado junto a otros cinco jóvenes catedráticos de instituto en 1965) bajo el título ‘La familia Artero en NuevaYork’. Ahora, parte de esas imágenes vuelven a presentarse al público, completadas con la visión actual de la ciudad que ofrece Chema Artero (Almería, 1981), fotoperiodista y nieto de uno de los fundadores del Grupo AFAL. 




‘Objetivos cruzados’ es el nombre de la muestra que desde mañana jueves y hasta el viernes 30 de septiembre acoge la Diputación de Almería. Una propuesta producida por la Fundación de Arte Ibáñez Cosentino que también ha editado un libro homónimo con las imágenes y textos de los fotógrafos y de María del Mar Artero Núñez y Juan Manuel Martín Robles, familiar de los autores y comisario de la muestra respectivamente.




“La idea surgió sobre la marcha en un viaje que realicé a Nueva York en abril de 2015. Me vinieron a la mente las imágenes que había visto en casa de mis abuelos, aquellas fotos de rascacielos hechas con ojo de pez. Pensé en rescatarlas y hacer una exposición que también sirviera para homenajearle”, dice a LA VOZ Chema Artero.




Mientras las fotografías de su abuelo -de quien se cumplen este mes veinticinco años de su adiós- son “más arquitectónicas”, las suyas dan una visión “más humanista” y muestran el paisanaje de barrios como Little Italy y Chinatown.




“De él podrán verse dieciséis obras en una pared y enfrente habrá otras dieciséis mías. Todas tienen el mismo formato y están hechas en blanco y negro”. Dos miradas “que no tienen nada que ver”, asegura Chema, pero que se complementan para seguir escribiendo la melodía de una ciudad inmortal. 




Aquella primera vez en Nueva York
Las visiones de Nueva York que arrojan los Artero tienen algo en común además del blanco y negro y de la mirada inquieta: en ambos casos se trata de un primer contacto con la urbe. “Mi abuelo no pretendía descubrir nada, es una ciudad que ha sido retratada por los mejores. Es una primera visión y también ha sido la mía. De hecho, no son las que mejor definen mi estilo”, apunta Chema Artero, quien ha mostrado su trabajo en ‘Ideal’, ‘Sur’ y ‘Vice’. Ahora ha vuelto a Almería donde trabaja como fotógrafo de bodas y sigue ejerciendo el reporterismo tras la cámara.




 



Temas relacionados

para ti

en destaque