Máxima deportividad: desde el Audi S6 hasta el RS 6 Avant y el RS 7 Sportback

El ADN de Audi no cambiará: una mirada al futuro electrificado

Pedro Lamazares
15:00 • 10 ago. 2023

El árbol genealógico de los RS: de los RS4 Avant y RS 6 Avant al RS 6 Avant plus






Audi introdujo el concepto de familiar deportivo con el RS2 y el S6 plus. El primer verdadero modelo RS de quattro GmbH fue el RS4 Avant (B5) de 1999. Comparado con el Audi S4, apareció en escena con una carrocería ensanchada y un motor desarrollado en colaboración con Cosworth, que por aquel entonces rendía una impresionante potencia de 381 CV. Desde principios del año 2000, el Audi RS4 Avant, publicitado y comercializado como Audi RS4 y como modelo especial Audi RS4 Sport, se convirtió en el nuevo buque insignia de la serie Audi A4 B5 y fue un rotundo éxito de ventas: en lugar de las 3.000 unidades previstas, se entregaron a clientes algo más de 6.000 unidades del Audi RS4 Avant. Había muchas otras ideas para modelos de altas prestaciones de quattro GmbH; la retirada progresiva del RS4 también liberó capacidad en Neckarsulm para el desarrollo y la producción de un nuevo modelo. En el año 2002 no se lanzó al mercado ningún sucesor directo -el siguiente RS 4 (B7) no estaría disponible hasta 2005-, sino que el RS 6 representó una especie de “hermano mayor” basado en el A6 de la generación C5.






Junto con las versiones Sedan y Avant del primer RS 6, también debutó una nueva nomenclatura. A partir de ese momento, todos los modelos RS llevarían un espacio en su denominación. La serie especial limitada RS 6 Avant plus también vio el regreso de la insignia de rendimiento “plus” del S6 plus. Una unidad de control del motor optimizada optimizó la curva de par, lo que se tradujo en un aumento de la potencia de 30 CV, hasta alcanzar los 480 CV. Para garantizar una refrigeración óptima del motor también se actualizó el sistema de refrigeración.



Lo que hacía especial a esta versión es que era el primer Audi que superaba oficialmente los 250 km/h. Quattro GmbH llevó al RS 6 plus hasta los 280 km/h, convirtiéndolo en el vehículo deportivo familiar más rápido del momento. Los discos de freno perforados, el sistema de escape deportivo y la suspensión DRC pasaron a formar parte del equipamiento de serie. Llantas de 19 pulgadas y combinaciones especiales de pintura y tapicería interior caracterizaban esta edición. Audi limitó la producción a 999 unidades del Avant. Stephan Reil, Director de Desarrollo Técnico de Audi AG en Neckarsulm, rememora: “Con 480 CV, el RS 6 Avant plus estaba en lo más alto del segmento. Pero, por otro lado, ese coche iba a ser un lobo con piel de cordero que se ganaría a la gente a base de discreción”.







Más potencia y par motor: “plus” se convierte en “performance”


La variante plus de la generación C6 llegó al mercado en 2010 y se limitó a 500 unidades. A diferencia de su predecesor no contaba con potencia adicional, ya que el V10 mantenía sus 580 CV; pero ofrecía una velocidad máxima de 303 km. El único vehículo Audi más rápido en aquel momento era el R8. Los clientes podían configurar el coche con dos paquetes de equipamiento.


El RS 6 plus Sport contaba con la consola central y el salpicadero tapizados en cuero, mientras que el RS 6 plus Audi exclusive presumía de un acabado de pintura en un color individual según las preferencias del cliente. En la versión Audi exclusive, los asientos, los paneles de las puertas y el reposabrazos central estaban tapizados en uno de los atractivos colores del programa de personalización de Audi. Todos los componentes de los asientos hacían juego con el color de cuero seleccionado. Ambas variantes estaban equipadas con llantas de 20 pulgadas, suspensión deportiva plus, sistema de navegación y asistente de conducción, así como el paquete de carbono para el compartimento del motor.




Para la generación C7, “plus” se convirtió en “performance”: el Audi RS 6 Avant performance y el RS 7 Sportback performance se estrenaron en 2016. Con un motor ligeramente modificado, la potencia aumentó a 605 CV, 45 CV más que en el modelo base. La función overboost incrementaba brevemente el par hasta 750 Nm en el modo de conducción “dynamic”. Dependiendo del equipamiento, la velocidad máxima se limitaba a 250, 280 o 305 km/h. El coche aceleraba de 0 a 100 km/h 0,2 segundos más rápido (3,7 s) y de 0 a 200 km/h hasta 1,4 segundos más rápido (12,1 s). Las llantas de 21 pulgadas formaban parte del equipamiento de serie.




Temas relacionados

para ti

en destaque