A sus 35 años, Miguel Ángel Corona siente que le queda mucho fútbol por repartir. Con el paso de los años los jugadores van alargando cada vez más sus carreras deportivas y para aquellos que tienen dudas sobre el rendimiento que puede ofrecer en el Almería, el talaverano tiene claro que., “la edad no es un inconveniente, sino una ventaja. Hay avances para que aguantes más y yo tengo la ‘suerte’ de que nunca he sido rápido, por eso puedo durar más”.
De hecho, durante el entrenamiento de ayer en el Mediterráneo pudo aguantar casi todo el apartado físico, aunque el cuerpo médico no le quiso forzar. El jugador de élite, con el paso de los años, gana más en resistencia que en explosividad, y Corona se siente preparado para seguir creciendo como deportista.

No fue fácil su marcha el pasado verano, ya con la Liga en marcha, pero el regreso sí fue más sencillo, ya que su “amigo” y casi hermano, Fernando Soriano, le abrió las puertas de par en par.

Sonido SER: Miguel Ángel Corona, centrocampista del Almería.