No vale especular. Hay que salir a ganar, “a avasallar”, como señaló Pipo Goro en la rueda de prensa previa al enfrentamiento con el Nástic. Pero en Huesca, no valen medias tintas, y todo lo que sea dar ventaja al rival, te puede mandar al pozo. Por ello, el míster rojiblanco lleva dos días ensayando con diferentes sistemas para dar un salto de gigante en la pugna por la salvación. Tiró de libreta para jugar con defensa de cuatro efectivos, ya que Ximo Navarro está sancionado y Carlos Cuéllar no tiene muchas opciones. Aunque todavía es pronto para saber qué once sacará el Almería en Huesca, una de las variantes de Goro es dar entrada al nigeriano Kalu Uche, que se entiende de maravilla con Quique González, y éste quedaría más liberado en el juego.

Crucial
No se puede permitir un partido como el de Soria, en el que el rival te gana por intensidad. El Huesca tiene dos puntos más en la clasificación y la única manera de quedarte, al menos, una semana más fuera de los puestos de descenso es ganando en El Alcoraz, y Goro quiere sorprender. Los de Anquela tienen un problema en su campo, siendo el peor local de la Segunda División, y el Almería lo tiene en sus desplazamientos, donde solo pudo vencer en El Toralín a la Ponferradina. Será una guerra de cartas en la que el empate favorecería más a los azulgrana.

Vuelve el ‘jefe’ Saveljich al eje de la defensa para ayudar a cubrir la importante baja de Ximo. El argentino hace mejores a sus compañeros y en las dos semanas que se ausentó Casto encajó cuatro goles. Se avecinan novedades para Huesca en un Almería que se da cuenta de lo poco que queda para el final, y se va a jugar el todo por el todo lejos del Mediterráneo. Son cinco jornadas por delante y solo dos son en casa. Todos esperan ver a once jugadores que marquen territorio desde el primer minuto en El Alcoraz.