El Almería no tiene demasiada tradición copera. Y esa falta de apego al torneo del KO se ha visto reflejada de forma destacada en sus tres últimas participaciones coperas en las que el equipo almeriense no fue capaz de superar la segunda ronda de esta competición.

En las del 2012 y 2013 cayó en dieciseisavos y la temporada pasada, en la que comenzó su participación en esa ronda, fue eliminado en octavos por el Racing, equipo de Segunda B y, por lo tanto, dos categorías por debajo de los almerienses. La del curso pasado supuso además el estreno de Francisco en el banquillo en la Copa.

La participación más brillante firmada por el conjunto rojiblanco en la Copa del Rey fue en la edición del 2011, la primera en la que los almerienses superaron más de dos rondas. Entonces, el club que preside Alfonso García se convirtió en el equipo revelación del torneo, al meterse en semifinales. Entonces llegó el Barcelona y los almeriense se quedaron sin final.

Mal momento
En esta oportunidad la Copa del Rey llega en un mal momento para el Almería, el peor de la temporada. La derrota del pasado lunes frente al Rayo Vallecano, que desde algunos sectores se pretende endulzar, pero que no engañó a una gran parte de la grada, que mostró su protesta al final del partido, es un mal antecedente para estrenarse en este emocionante campeonato.