El almeriense Molo sigue siendo santo y seña del Lleida. En el partido de ayer ante el Reús los azulillos perdían por un gol a dos y terminaron remontando en partido gracias a un tercer gol conseguido por el central nacido de nuestra cantera.
Molo, vive sus mejores momentos en el Lleida, club que le ha recibido como uno de sus símbolos de cara al ascenso a la Segunda División. El pasado año se les escapó el tren pero está dispuesto a volver a subirse al mismo.
Molo está lejos de casa pero es feliz porque se siente muy querido en el Lleida. Se prodiga mucho con el gol y siempre sube para culminar la estrategia. Su juego aéreo es de lo mejor de la categoría.