El mes de abril de 2026 tiene un toque almeriense entre las páginas del calendario que publica cada año el Ejército de Tierra. En concreto, su protagonista es un salvador de Almería capital destinado ahora en Melilla que en mayo salvó a dos mujeres. 

Su nombre es José Vicente González Puertas, aunque para muchos siempre será el compañero del IES Celia Viñas, el hijo de los kiosqueros del Paseo de Almería o, simplemente, Josevi. 

El cabo Puertas, tal y como relata el Ejército de Tierra, brindó una asistencia crucial tras un accidente de tráfico en la A-7 a la altura de El Ejido. Fue la noche del 18 de mayo de este año. 

El militar, que regresaba de permiso, se encontró el siniestro, en el que resultaron heridas dos mujeres. Actuando de inmediato gracias a su formación sanitaria, el cabo alertó al 112 y realizó una valoración primaria de las víctimas. 

En el segundo vehículo, la conductora estaba atrapada con una herida considerablemente en la cabeza, y su hija adolescente sufría una brecha y una crisis de ansiedad. El militar se centró en asistir a la menor, aplicándole un vendaje y técnicas de control de la ansiedad mientras la alejaba del peligro del accidente. 

Su intervención, que duró unos cuarenta minutos, fue esencial hasta que los bomberos liberaron a la madre y ambas fueron evacuadas. El cabo, que rechazó el protagonismo, afirmó que solo hizo lo que debía, aplicando su preparación.

Este reconocimiento, "algo que alcanza está índole, no es esperado ni buscado", plantea el cabo Puertas en declaraciones a LA VOZ.

Calendario de 2026

El calendario, presentado por el Jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), general de ejército Amador Enseñat y Berea, junto a la ministra de Defensa, Margarita Robles, tiene como lema "Siempre disponibles" y en él se rinde homenaje a los militares que han protagonizado acciones destacadas, como es el caso del almeriense José Vicente González Puertas.

En concreto, el calendario rinde homenaje a aquellos componentes del Ejército de Tierra que, yendo más allá del estricto sentido del deber, en la mayoría de ocasiones estando fuera de servicio, y hasta poniendo en riesgo su integridad física, decidieron intervenir en auxilio de quien en ese momento más lo necesitaba.

El acto ha contado con el testimonio de varios de los protagonistas, tanto del personal militar como de personal civil socorrido. Desde la humildad, han relatado los hechos acontecidos, teniendo todos ellos en común la motivación de sus acciones: un profundo sentido del deber, una inquebrantable vocación de servicio, una exigente y constante preparación, así como un profundo sentimiento de responsabilidad y amor a España.

Con este calendario, el Ejército de Tierra ha querido compartir con la sociedad a la que sirve y de la que forma parte, uno de los principios fundamentales de la institución: la disponibilidad y preparación permanente al servicio de España y de los españoles.