¿Cuándo los jueces dejarán de ser numéricamente conservadores? ¿Cuándo los partidos dejarán de decir que su misión es transformar la sociedad? ¿Cuándo dirán la verdad? ¿Cuándo no se aprovecharán de la corrupción para tumbar al partido adversario aunque ellos estén hasta las cejas? ¿Cuándo cesará la sempiterna cantinela de los líderes de opinión diciendo que ellos son imparciales? ¿Cuándo la Iglesia católica oficial dejará de predicar que ella es la salvación de los pobres? ¿Cuándo la derecha de este país reconocerá que si no hubiera sido por los sindicatos aquí estaríamos todavía en la esclavitud? Por lo tanto, ¿cuándo el PP abandonará la sangrante excusa de que la huelga general es inútil y no conduce a nada? Haciendo el despido más fácil y barato y dejando al empresario con toda clase de sutilezas laborales ¿qué ciencia infusa les convence de que se creará empleo en cuanto el empleador no obtenga beneficios? Hablamos mucho del hombre nuevo pero ¿qué hombre nuevo ni qué milongas puede venir de las leyes de educación que se van turnando según los intereses de la CEOE y de la Conferencia Episcopal? ¿Por qué los del PP se aprovecharon bien de la huelga general que le escenificaron los sindicatos a Zapatero y ahora ven mal que hagan lo mismo con ellos con una reforma laboral que nos devuelve al siglo XIX? Estamos en plena campaña andaluza. Ninguno de los líderes, según dicen las encuestas, aprueba. Ninguno pasa del tres con algunas décimas. ¿Ustedes creen que esto pasaría en un banco o en una gran empresa? No. Solo pasa en la política donde todo se reduce a esperar. O gobierna el PSOE o gobierna el PP. Los líderes lo saben, y todo es cuestión de esperar treinta años. ¿Ustedes creen que los jóvenes, que cada vez votan menos, van a ir a los mítines, a cantar "tú sí que vales". Vamos, tío, prefieren tomar el sol.