El edificio sindical, esa torre diseñada por Antonio Góngora en 1958 es uno de los inmuebles más característicos de la ciudad. Ubicado en pleno centro de la ciudad, justo en esa esquina entre Javier Sanz y Méndez Núñez, es ese inmueble al que seas trabajador o empresario, y no digamos ya si eres periodista, tienes que ir muchas veces a lo largo de tu vida. Es lo que tiene que allí se alojen CCOO, UGT o Asempal.

También es verdad que en esas visitas siempre la pregunta era la misma: ¿por qué está tan deteriorado? Pues bien, los trabajos que van a permitir que este edificio entre en el siglo XXI no solo por su rehabilitación sino por su adaptación para que sea eficiente energéticamente hablando.

Estas obras, cuyas redes se pueden ver perfectamente paseando por el entorno, van al ritmo marcado y así lo confirman fuentes de la propia empresa que las realiza a la Subdelegación de Gobierno. Así, en estos momentos está en marcha la primera fase de los trabajos, cuya previsión es que acaben a finales de marzo.

Trabajos en marcha

Esta fase se corresponde con la parte norte del edificio cuya fachada se corresponde con la calle Méndez Núñez y parcialmente con la calle Javier Sanz. En esta ala se están finalizando los trabajos de envolvente como los cambios de carpinterías, actuaciones en cubierta y ejecución del sistema de aislamiento térmico exterior, SATE, en el patio interior.

Siguiente etapa A principios de abril se comenzarán los trabajos en el ala sur del edificio y se replicarán prácticamente el mismo tipo de actuaciones que en la anterior. Esta segunda fase tiene previsto que esté acabada para final de octubre de 2025.

Cabe recordar que estas obras que están cambiando y renovando la fisionomía del edificio sindical cuenta con una importante inversión: 3,6 millones de euros que llegan desde el Ministerio de Hacienda a través de la Sociedad Mercantil Estatal de Gestión Inmobiliaria de Patrimonio, Segipsa.

Ya en la presentación de estas obras el subdelegado del Gobierno en Almería, José María Martín, quiso resaltar que los trabajos previstos con cargo a los fondos europeos del Plan de Recuperación, prevén “la instalación de aislamiento térmico en fachadas, la renovación de ventanas y cubiertas, y la instalación de sistemas de climatización y ventilación mejorados”. Es importante señalar que “los objetivos a cumplir con esta obra es conseguir la reducción mínima del 30% del consumo de energía primaria y la mejora de al menos una letra en la calificación energética”. Además, contempla una instalación fotovoltaica para reducir el consumo energético.

Para la realización de esta obra se ha contado en todo momento con la colaboración y consenso de las organizaciones para que los trabajos sean compatibles con su presencia en el edificio.

La actuación se inserta en un conjunto de obras de eficiencia energética que el Estado realiza entre 2024-2026 en 34 edificios de patrimonio sindical situados en otras tantas capitales españolas, con un apoyo financiero del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia, MRR, por un importe de 98,2 millones, mediante un acuerdo entre Transición Ecológica y Trabajo.