Prostate Institute Barcelona (PIB) está formado por un grupo de urólogos especializados en el diagnóstico y tratamiento de las enfermedades de la próstata. Ahora, el centro llega a Almería.

Por este motivo hablamos con el Dr Gilberto Chéchile, director de Prostate Institute que cuenta con más de 20 años de experiencia.

P. ¿Qué adelantos se han producido en los últimos años en el diagnóstico del cáncer de próstata?

En los últimos años se han incorporado nuevos métodos en el diagnóstico del cáncer de próstata que nos permite adelantar este proceso hasta 7 años.

Así, el porcentaje de curación del tumor está por encima del 90%, una cifra complicada de alcanzar años anteriores.

En nuestros centros hemos incorporado la biopsia por fusión de las imágenes obtenidas con resonancia magnética nuclear y la ecografía, lo cual nos permite biopsiar con una gran fiabilidad las lesiones sospechosas detectadas en la resonancia.

De esta forma, se detectan más tumores que con el sistema tradicional de la biopsia guiada solo por la ecografía.

También hemos incorporado nuevos marcadores que se determinan en la sangre (K4 Score) o en la orina (PCA3, Select MDx) de los hombres con sospecha de cáncer de próstata (biopsia líquida) y que nos informa en qué casos es necesario realizar una biopsia de próstata.

P. ¿Qué innovaciones se han producido en los últimos años en el tratamiento del cáncer de próstata?
Los tratamientos convencionales del cáncer de próstata como la cirugía radical o la radioterapia, aunque producen elevados porcentajes de curación del tumor, ocasionan efectos secundarios como la disfunción eréctil, alteraciones severas del orgasmo o la incontinencia de orina que afectan severamente la calidad de vida de los hombres.

Por ello, en los tumores con malignidad moderada o baja utilizamos tratamientos poco agresivos que producen cifras de curación similares a la cirugía radical, pero sin afectar la actividad sexual de los hombres ni producir incontinencia de orina.

Tal es el caso de la braquiterapia en tiempo real dinámico que realizamos desde 2003 en nuestro centro de Barcelona, que hemos tratado más de 600 casos y hemos obtenido un porcentaje de curación de 90% a los 10 años.

Recientemente hemos incorporado el tratamiento focal del cáncer de próstata que con electroporación irreversible (IRE) o HIFU se trata solo la zona donde se encuentra el tumor.

Pero para ello, a ese paciente se le debe haber realizado previamente una biopsia por fusión de imágenes que nos podrá descartar que existan otros focos de tumor en otras zonas de la próstata.

P. ¿Qué tratamientos se utilizan para las enfermedades no malignas de la próstata como la hiperplasia benigna?
Desde hace 20 años hemos incorporado el tratamiento con láser que ha venido a sustituir a la resección transuretral con bisturí eléctrico ya que produce menos posibilidad de hemorragia y permite tratar hombres muy ancianos y con serias enfermedades asociadas ya sean cardíacas o respiratorias.

Estos hombres estaban condenados a vivir el resto de la vida con una sonda en la vejiga cosa que se evita al poder ser operados con el láser.

Unos de los efectos secundarios que producen todas las cirugías de la hiperplasia benigna de la próstata ya sea con bisturí eléctrico o con láser es la eyaculación retrógrada.

Aunque no suponga un problema importante en los hombres mayores de 60 años, ese efecto sí que puede ser muy importante para un hombre más joven que necesite someterse a este tipo de cirugía.

Para evitar la eyaculación retrógrada, recientemente nuestro grupo de experos ha incorporado dos tratamientos poco agresivos como son Rezum y Urolift que se realizan con sedación y con un ingreso que oscilará entre las 2 y las 3 horas.

Aunque los resultados sobre la micción no son tan significativos como los obtenidos con láser o RTU al no alterar la eyaculación se trata de una opción válida con lo que logran mejorías durante algunos años y puede abandonar la medicación que si es efectiva también produce eyaculación retrógrada.