Manu Chao: “El público es un músico más en mis conciertos”
El cantante llega tras siete años a Almería para actuar mañana en Puebla de Vícar junto a Sonido Vegetal

Manu Chao, durante uno de sus conciertos. (Foto: Brais Seara)e;
“Da alegría volver a actuar por aquí. Mi barrio en Barcelona está lleno de andaluces, así que no he perdido la fibra. Después de años sin tocar por el estado español ya era hora de una nueva gira. Hemos estado en Galicia, País Vasco y a tocaba Andalucía, un poquito de sur”. Manu Chao (París, 1961) atiende a LA VOZ por teléfono días antes de su concierto en Puebla de Vícar (mañana domingo, Campo de fútbol, 23 horas). Un concierto que supone su regreso a Almería desde que en septiembre de 2007 congregó a 30.000 espectadores en la Experiencia Espantapitas de Vera.
Manu Chao llega ahora con La Ventura, su nuevo proyecto. “Somos como una familia, gente que ha estado conmigo siempre. Como solemos hacer últimamente, cantaremos un poco de todo: canciones de mi carrera, con Mano Negra, algunos temas que nunca se grabaron... Hay repertorio de sobra, así que estaremos hasta el fin de la noche, hasta que el público quiera”.
A viva voz
Conocido por su compromiso tanto como por su música, el artista franco-español, al que teloneará la banda granadina Sonido Vegetal, sigue alzando la voz con sus canciones. “A mí me inspira la acera. Me gusta estar en la calle, con los vecinos, con la gente que vive su día a día. La situación hoy es muy crítica, todas las ventajas sociales que se ganaron a pulso nuestros padres y abuelos están derritiéndose como nieve al sol. Me parece dramático”.
Eso sí, no pierde la esperanza en lo que él llama “el huerto humano”. “Creo mucho en el vecindario. Hoy, cuando es difícil creer en los políticos, hay que organizarse entre vecinos. Unos somos de izquierdas, otros serán de derechas, hay niños, abuelos, gente de todas las edades, de aquí de toda la vida o extranjeros. Pero el barrio tiene que estar unido”.
Unión que también surge entre el artista y su público, derribando la barrera psicológica del escenario. “La base de nuestros conciertos tiene mucho que ver con la adrenalina y la energía. La gente tiene que venir con ganar de darnos energía y nosotros se la vamos a devolver a saco. Si la peña se enrolla, se crea un juego, una pequeña dinamo de energía que va del palco al público y del público al palco, y viene y va y viene y va hasta que el público se vuelve un músico más. Así conseguimos una energía muy positiva, que da fuerza a todo el mundo. Una energía esperanzadora”, concluye.