Tiene tan solo quince años pero su gran capacidad de oratoria vaticina un prometedor futuro como comunicadora. Marta Calderón es una joven almeriense amante de las letras que sueña con estudiar periodismo y que hace tan solo unos días vivió una experiencia “tan emocionante como enriquecedora”:  su primer torneo de debate.

Todo comenzó a principio de curso, cuando la profesora de Economía de La Salle Virgen del Mar, Marisa Gómez, propuso a los alumnos de primero de Bachillerato la participación en un debate, concretamente el I Torneo Nacional de Debate Económico. La ilusión invadió al instante a esta joven que disfruta hablando en público y que no dudó en comunicarle a la docente su deseo de asistir y preparar el tema, a pesar de no estar cursando la asignatura en cuestión.

Tras varias semanas de aprendizaje, de conocer en profundidad la digitalización en el ámbito del empleo (tema del debate), sus efectos y los posicionamientos sobre este hecho tanto a favor como en contra, la estudiante y sus compañeros de equipo -Álvaro Mezquita, Ramón Montes y Olga Gil- se enfrentaron el pasado martes 29 de octubre a tres intensas horas de debate junto a otros tres centros de la provincia. “Realizamos tres debates en total, fueron unas horas en las que no se podía bajar la guardia, el nivel de concentración tenía que ser altísimo”, asegura la joven, que a pesar de no haber pasado a la fase final, afirma haber vivido una experiencia única con sus compañeros de colegio.

Las claves

Si bien reconoce que no hay un secreto exacto para hablar bien en público y convencer con tu discurso, Marta cree que es fundamental sentirte preparado. “Personalmente, lo que me hace estar tranquila cuando me enfrento a un discurso en público es conocer en profundidad el tema del que voy a hablar, es la única forma de estar cómodo y poder improvisar”, relata la almeriense, quien añade que otra de sus claves es “creérselo”. “No sé si esto me lo han enseñado los años en los que he hecho teatro, pero si quieres que la gente crea tu discurso, tanto en un debate como en cualquier intervención en público, tienes que creer en lo que hablas”.

Si bien en clase ha llevado a cabo varios proyectos que han precisado hablar en público, Marta Calderón cree que este tipo de actividades deberían ocupar más espacio en las horas lectivas ya que, como relata, “en la mayoría de las profesiones, para ser un buen profesional tienes que ser un buen comunicador, si no es así nadie va a confiar en tu trabajo o en tu producto”.

En esa misma línea, en la de las profesiones, se ubica una de las mayores preocupaciones de esta estudiante: la libertad de los jóvenes de decidir su futuro. “Miro a mi alrededor y observo a jóvenes que se plantean renunciar a su felicidad por elegir profesiones que ahora funcionan bien, pero yo digo, ¿y qué sabemos lo que va a tener demanda en 10 años?”, manifiesta la almeriense.

Es difícil conocer aquello que funcionará en unos años, pero con jóvenes con la preparación y actitud de Marta Calderón, parece menos ‘preocupante’.