En los últimos días, el nombre de Frank Cuesta ha estado en boca de todos. Todo comenzó con unos polémicos audios en los que se le acusaba de maltrato animal dentro del Santuario que gestiona. A esto le siguió una sorprendente confesión del propio Frank, en la que aseguraba que su imagen pública era "un personaje" y que todo lo que se decía sobre él formaba parte de una "farsa". Y, por si fuera poco, cerró esta cadena de controversias con un comunicado en el que denunciaba haber sido presionado para grabar ese vídeo. 

"Se me ha ido de las manos el personaje"

Con guion en mano, el extenista aseguraba que no era veterinario ni herpetólogo, que los animales de su santuario habían sido comprados y que su finca era más una granja que un refugio. "Se me ha ido el personaje de las manos por culpa de un problema de mitomanía", expresaba Cuesta, desmintiendo también que su exmujer Yuyee, tuviese problemas con el alcohol y las drogas.

Poco después, Frank aseguró que todo formaba parte de un plan para salir del paso, que le habían obligado a leer ese guion para evitar problemas y que, en realidad, las cosas nunca son como parecen. En este contexto tan delicado, ha aparecido una nueva voz: la de su hijo mayor, Zape Cuesta, quien ha decidido hablar públicamente a través de su canal de YouTube, donde reúne a casi 200 mil seguidores. 

Zape necesita salir del país

“Creo que necesita explicar lo que ha pasado estos últimos días”, dice con sinceridad al comenzar el vídeo. Y es que el joven no solo ha querido dar su punto de vista, sino también abrir su corazón.

Zape confiesa haber vivido semanas complicadas: “He estado bastante agobiado, hemos tenido varios juicios… Ahora que está todo ya arreglado, al menos con el tema de las querellas, yo pienso que necesito salir del país”. 

Cansado y visiblemente afectado por todas las acusaciones que se han vertido sobre su padre, Zape asegura que, tras vivir una temporada en España con motivo de su carrera futbolística, decidió volver a Tailandia, país que le vio nacer, para ayudar a su padre. Pero ahora que está todo "solucionado", el chico no quiere seguir allí y cree que ha llegado el momento de cerrar una etapa.

“Vine a Tailandia específicamente porque quería ayudar a mi padre con ese tema. Lo hemos conseguido y ahora mismo, sinceramente, no me siento seguro estando en Tailandia. No quiero estar aquí, no me siento seguro aquí, y me quiero pirar ya”, afirma sin rodeos, dejando claro que su decisión no es un impulso, sino una necesidad.

La polémica hace mella en el hijo de Frank Cuesta

Criado en Tailandia junto a Frank, Zape había regresado al país asiático tras iniciar su carrera como futbolista profesional en España. Sin embargo, la tensión y la presión mediática que rodean a su familia han hecho mella en él. Por eso, ahora está a la espera de poder marcharse definitivamente. “Fui a la embajada a renovar el pasaporte, todavía no ha llegado pero… Me tengo que ir y me voy a ir”, asegura, antes de dejar una frase que lo dice todo: si el vídeo se está viendo, es porque él ya no está en Tailandia.