El parlamentario autonómico por el PSOE de Almería, José Luis Sánchez Teruel, ha puesto el foco este martes en dos problemas críticos de la sanidad en la provincia de Almería: la demora en la apertura de las consultas externas del hospital de Roquetas de Mar y el incremento de las listas de espera para los pacientes almerienses, que en el último año han pasado de unos 98.000 a cerca de 100.000 personas.

Sánchez Teruel ha reunido esta mañana a los medios en el acceso nuevo del Hospital Universitario Torrecárdenas, para abordar la situación sanitaria en la provincia. Allí, el parlamentario autonómico por el PSOE,  ha denunciado las deficiencias en la gestión sanitaria del Gobierno de Juanma Moreno.

Sobre Roquetas de Mar, Sánchez Teruel ha alertado de que los expedientes de contratación de personal y equipamiento aún no se han iniciado, lo que retrasa la apertura de estas instalaciones y condena a miles de personas a esperar más tiempo por atención sanitaria. 

“Demorar estas consultas es condenar a miles de almerienses a estar en listas de espera y mal atendidos por la sanidad pública”, ha subrayado. También ha recordado que la ampliación del Hospital de Poniente sigue sin licitarse, a pesar de ser un compromiso del gobierno andaluz.

Respecto a las listas de espera, el parlamentario ha señalado que los datos más recientes muestran un empeoramiento en el último año, pasando de unos 98.000 pacientes en junio de 2024 a cerca de 100.000 actualmente. 

“A pesar de que el Gobierno de Moreno dispone de más recursos que nunca para la Sanidad Pública, no consigue reducir las listas de espera. Esto demuestra que la gestión actual no es suficiente para garantizar una atención rápida y eficaz”, ha afirmado.

Sánchez Teruel ha reclamado medidas urgentes para abrir las consultas externas en Roquetas y licitar la ampliación del Hospital de Poniente, asegurando que los almerienses merecen un sistema sanitario que funcione. 

Además, ha apuntado que un cambio en la gestión, como el que supondría la llegada de María Jesús Montero al Gobierno de Andalucía, podría garantizar una administración más eficiente de los recursos públicos y una mejora real en la atención sanitaria de la provincia.