El primer parque para perros de una comarca de Almería será una realidad en breve
Las instalaciones delimitadas en el centro de la localidad, contarán con arbolado y juegos de habilidad

Imagen de archivo del parque canino Gloria Fuertes, en el barrio de Nueva Andalucía de la capital almeriense.
El Valle del Almanzora contará pronto con uno de sus primeros parques caninos. En este tipo de espacios públicos dirigidos al recreo de los perros, al contrario que cuando se sacan a pasear por la calle, se puede prescindir de elementos como la correa o el bozal (éste último con la excepción de perros potencialmente peligrosos), aunque en todo caso siempre vigilados por sus dueños, eso sí.
Pese a que en los últimos años se ha multiplicado la adopción de animales por parte de las familias, los servicios acordes al crecimiento al número de estos animales no han sido los suficientes, como en el caso de las áreas caninas -también llamadas pipicán- que en toda la provincia suponen a duras penas algo más de una decena pese a contar con 103 municipios.
Ahora, esta comarca almeriense disfrutará por primera vez de este tipo de servicio de forma pública y además estará ubicado en una zona céntrica de la localidad, según ha anunciado la alcaldesa de Albox, María del Mar Alfonso, para la que se trata de una “buena noticia” para la localidad.
“Es uno de los compromisos que cumplimos. Será una zona que contará con arbolado y con todo lo necesario para nuestro parque canino”. Con ello y a la vista de las imágenes compartidas por la alcaldesa, bien se puede se referir a los juegos deportivos, de habilidad y agilidad que suele haber también en este tipo de instalaciones, según lo mostrado por Alfonso.
En concreto, la ubicación del parque está prevista junto a la rotonda del conocido como ‘puente nuevo’, en las proximidades de la calle Ramón y Cajal, de forma anexa al nuevo ramal que se está ejecutando desde la glorieta y que supondrá un nuevo acceso -y salida- al núcleo urbano albojense.
A falta de conocer más detalles del proyecto, como norma general este tipo de instalaciones dedicadas al disfrute y el esparcimiento de los cánidos se encuentra dentro de un espacio cerrado y habitualmente vallado, y es normal que figuren elementos como dispensadores de agua así como bolsitas para la recogida de excrementos y bancos para los acompañantes de las mascotas, entre otros como la señalítica necesaria junto a las normas de uso.