Vigila la costa de Almería como si los años no hubiesen pasado. La Torre del Pirulico -como se llama popularmente- es una de las joyas históricas de la provincia. Perteneciente al municipio de Mojácar, esta torre sigue siendo un misterio para muchos por su historia y ubicación.

Se encuentra algo más al sur que la Torre de Macenas, también en Mojácar, y es considerada una atalaya nazarí porque se construyó entre los siglos XII y XIV. El objetivo de esta torre en el pasado era claro: la vigilancia de las costas frente a posibles ataques extranjeros. Cuando un enemigo era avistado, se comunicaban entre torres mediante señales de humo. 

Legado incalculable

Su arquitectura es simple, sin demasiados detalles, pero su ubicación es inmejorable. Está construida en mampostería con piedra del lugar y mortero de cal y tiene un gran arco desde el que se puede divisar toda la costa. Desde hace varios años, esta imponente torre está catalogada como Bien de Interés Cultural (BIC).

La importancia y riqueza de este monumento es incalculable. Tanto es así que el Ayuntamiento de Mojácar presentó a inicios de este año un proyecto para rehabilitar la torre, considerada un elemento patrimonial de gran importancia. Entre las obras de restauración que se realizarán se pretende iluminar el recinto con focos LED alimentados con placas solares.

Si te apetece visitarla, su acceso es completamente libre y es muy recomendarlo hacerlo al atardecer, cuando la caída del sol baila con colores mágicos sobre el horizonte. Asimismo, empresas como Mojácar Tour ofrecen visitas guiadas por lugares como este en diversos puntos de la costa.