La Diputación ha presentado el Plan de Inversiones de Galasa para este año que supone obras por valor de 3,6 millones de euros de las que se beneficiarán 18 municipios del Levante y el Almanzora y de los que la Diputación aporta 2,5 millones y el resto los ayuntamientos. Se trata de uno de los puntos del acuerdo aprobado in extremis por el pleno de la Diputación en diciembre de 2016 para evitar el cierre de la empresa pública Galasa. El acuerdo contemplaba una inversión total de 5 millones, por lo que “este plan se ampliará en 2018 con otros 2,5 millones hasta alcanzar lo comprometido en el acuerdo de 2016”, ha señalado el presidente de la Diputación, Gabriel Amat.

No todos
De esta inversión solo se van a beneficiar aquellos municipios cuyos ayuntamientos hayan aprobado las nuevas tarifas del agua o hayan delegado las competencias de la gestión del ciclo integral del agua en la Diputación. Para los que sí se han adherido de una forma u otra a Galasa, el criterio seguido a la hora de repartir los fondos ha sido el de la población, fijando un mínimo de 60.000 euros.

Además, al igual que en el caso de los Planes Provinciales, cuanto menor es el municipio, mayor es el porcentaje que aporta la institución provincial. Así, mientras que los pueblos de menos de 1.000 habitantes aportarán el 10% de la inversión, los de entre 10.000 y 20.000 habitantes tendrán que poner el 55%. Eso sí, las bajas que se logren en las adjudicaciones de las obras se descontarán siempre de la cantidad que corresponde al municipio.

Los municipios que se beneficiarán de estas actuaciones son en el Levante Antas, con 200.000 euros de inversión; Bédar, con 66.375 euros; Carboneras, con 300.000 euros; Cuevas del Almanzora, con 400.860 euros; Huércal-Overa, con 500.000 euros; Los Gallardos, con 186.355 euros; Mojácar, con 259.600 euros; Pulpí, con 300.000 euros; Taberno, con 72.900 euros; Turre, con 200.000 euros; y Zurgena, con 191.035 euros.

En el Almanzora, los ayuntamientos que mejorarán sus redes de abastecimiento de agua dentro de este plan son  Albanchez, con una partida de 60.000 euros; Fines, con 131.135 euros; Laroya, con 60.000 euros; Macael, con 225.120 euros; Sierro, con 60.000 euros; Somontín, con 60.000 euros; y Suflí, con 60.000 euros.

Evitar fugas de agua
El objetivo del Plan es la renovación de las infraestructuras que evitará las pérdidas de agua derivadas de las roturas de redes y las actuaciones que hay que hacer se derivan de la auditoría técnica realizada por la empresa. Según ha explicado el diputado provincial del Fomento, Óscar Liria, que ha acompañado al presidente en la presentación del Plan, “una vez aprobada la inversión a realizar en un municipio, en función de los datos existentes en Galasa sobre el estado de la red, se determinarán las actuaciones, dando prioridad a aquellas obras que minimicen de forma considerable las pérdidas en las redes, bien sea por su antigüedad o por el número de roturas que haya”.

Según ha explicado Liria, las obras corresponden a las redes en baja, es decir, la distribución del agua dentro de los propios municipios y una vez cuenten con el visto bueno de los ayuntamientos, se redactarán los proyectos y se licitarán las obras en el menor plazo de tiempo posible.

Balance de seis años
Amat ha aprovechado la presentación del Plan de Galasa para recordar que “desde 2011, esta casa ha invertido 21,5 millones de euros en infraestructuras hídricas en la provincia, que han permitido hacer potabilizadoras, sondeos, saneamiento y abastecimiento, con el objetivo de llevar el agua potable a todos los municipios de la provincia”.
Así, entre 2011 y 2015, la Diputación destinó 13 millones de euros a infraestructuras hídricas, repartidos entre potabilizadoras, para las que se invirtieron 543.414 euros; sondeos, con una inversión de 1,3 millones, y obras en depuradoras, con un gasto de 545.609 euros. Además, se destinaron 6,5 millones en obras de abastecimiento, 3,2 millones para la red de saneamiento, y 700.000 euros en subvenciones directas a los ayuntamientos.
En el año 2016, esta inversión fue de 6,2 millones, mientras que en 2017, ya se han invertido 2,3. Si a estas cantidades se les suma los 3,6 millones del Plan Galasa, el total asciende a 25 millones de euros.