¿Generación de cristal o adultos sin empatía? FAPACE pone el foco en la infancia y el derecho a una crianza respetuosa
La federación denuncia el adultocentrismo y defiende la importancia de formar familias empáticas, informadas y con tiempo para cuidar

Hablar de empatía es hablar de educación y convivencia.
La etiqueta de “generación de cristal” ha calado hondo en algunos discursos sociales. Se repite con tono de crítica hacia la infancia, como si la sensibilidad o el respeto fuesen debilidades. Desde FAPACE, sin embargo, plantean otra lectura muy distinta: “Hablamos mucho de respeto, pero ¿respeto es igual a miedo? Quizás deberíamos empezar a hablar de empatía".
Para la Federación de Asociaciones de Familias del Alumnado de Centros de Educación Pública de Almería, hablar de empatía es hablar de educación, de convivencia y de prevención frente a problemas como el acoso escolar.
“Si nuestras criaturas son empáticas, es muy probable que reaccionen y busquen ayuda ante una situación de bullying”, explican. Por eso, no se trata de sobreprotección, sino de cuidadarlos, escucharlos y comprenderlos.
La infancia desatendida
En un mundo acelerado y diseñado para adultos, la infancia se ve constantemente desplazada. “Cada vez es más habitual ver carteles en los parques que prohíben el juego con pelotas o cualquier actividad que genere ruido”, denuncian. “Lo que no puede seguir ocurriendo es que se limite el derecho de la infancia a jugar en su propio barrio”.
A eso se suma una mirada académica que en muchos casos se ha quedado anclada en el pasado. “Hay familias que todavía llaman deberes a copiar textos sin sentido durante horas, mientras se olvida lo importante: jugar, explorar, aburrirse, construir con las manos”. FAPACE defiende formas activas y creativas de aprender, adaptadas al mundo actual y a la curiosidad natural de la infancia.
El problema, reconocen, no es solo de voluntad, sino también de estructura. “La solución mágica no existe. Hay muchas realidades familiares, pero empecemos por pedir jornadas laborales que nos permitan conciliar”, reclaman. FAPACE lleva años trabajando para que las familias tengan acceso a formación, espacios de encuentro y herramientas.
“Hemos visto cómo, año tras año, cada vez más familias se suman, se implican y aprenden. Por eso hoy queremos decirles algo sencillo: enhorabuena”.