Anastasia Dmytriv, vecina de Vícar y medallista paralímpica, y Eligijus Krasnekovas, brillante estudiante galardonado con el Premio Extraordinario de Educación Secundaria de Andalucía, han sido los grandes protagonistas de una noche inolvidable en el Teatro Auditorio Ciudad de Vícar. Ambos fueron homenajeados en un acto lleno de emoción, celebración y un reconocimiento merecido por sus logros excepcionales en los campos del deporte y la educación.

Anastasia, quien conquistó tres medallas en los recientes Juegos Paralímpicos de París 2024 (una de oro y dos de bronce), es la viva imagen de la superación. Con su talento innegable y su tenacidad imparable, ha demostrado que los límites solo existen en la mente. Su esfuerzo y dedicación la han llevado a lo más alto, y Vícar no ha querido dejar pasar la oportunidad de rendirle homenaje. 

Eligijus, por su parte, con su expediente académico impecable, ha sido reconocido como el mejor estudiante de Educación Secundaria de toda Andalucía, un reflejo de su trabajo incansable y su pasión por aprender. Ambos, con sus historias, son un faro de inspiración para la comunidad.

Gala del IES La Puebla

La gala, organizada por el IES La Puebla y respaldada por el Ayuntamiento, reunió a familiares, profesores, amigos y miembros de la Corporación Municipal para celebrar estos logros que no solo representan a Anastasia y Eligijus, sino a toda la comunidad educativa de Vícar. 

En su discurso, el alcalde Antonio Bonilla destacó que el éxito de estos jóvenes es un testamento de lo que puede lograrse cuando se cree en un proyecto educativo inclusivo, fuerte y accesible para todos: “Este es el fruto de creer en un proyecto como Vícar, Ciudad Educadora y Ciudad Amiga de la Infancia, y en una educación que acompaña, apoya y da espacio al talento sin restricciones”, subrayó.

Además, el IES La Puebla aprovechó la ocasión para reconocer a Patricia Prieto, entrenadora de Anastasia, quien ha sido su guía y apoyo durante diez años. En una emotiva intervención, Patricia compartió cómo la constancia, la perseverancia y la pasión por el deporte paralímpico han sido claves en el éxito de Anastasia. “El oro de Anastasia no solo es su logro, es también el resultado de un trabajo conjunto, de un esfuerzo constante y de una voluntad inflexible”, afirmó con orgullo.

La noche culminó entre aplausos y sonrisas, con la certeza de que tanto Anastasia como Eligijus no solo han alcanzado sus sueños, sino que también han dejado una huella indeleble en la comunidad de Vícar, demostrando que con esfuerzo, pasión y apoyo, no hay límites para lo que se puede lograr.