El demonio metido a regenerador democrático ¿ De quién es el invento de que al coloacar directamente al alcalde más votado salvamos la voluntad de todos los ciudadanos? El voto del elector es igualmente válido tanto si se le entrega a un partido grande como a uno pequeño. El PSOE llegó al Ayuntamiento ( recueden a Cabrejas) por un voto del partido socialista de Andalucía. Tambíén el PP hizo lo propio en otras partes. Si le ponemos el freno a los pactos o coaliciones mutilamos la representatividad de las instituciones municipales. Los padres de la Constitución, en su escarmentado afán de impedir el enfrentamiento derecha-izquierda en la guerra civil, recurrieron a la Ley D´ ont como fórmula favorecedora del tranquilo bipartidismo. El resultado no ha gustado nunca a los partidos menores que necesitan más votos para conseguir un diputado. Después de las elecciones europeas se ha visto que el bipartidismo ya no es lo que era. El partido del Gobierno teme que, en este momento ,una coalición de izquierdas pudiera robarle el poder municipal y por eso trata de impedirlo bajo la la excusa de un nuevo Frente Popular. Como ha dicho un autor, no es que esto no sea democrático , es que es otra democracia y a escasos meses de las elecciones y al margen de lo que piensan los otros partidos, resulta unilateralmente un poco trágala “ manu militari”- Es verdad que los peperos no se cansan de decir que quieren dialogar con todos, pero al final seguramente echarán mano de su mayoría absoluta. Ahora bien ¿ son ciertas las argucias electoralistas de la derecha? Un informe solvente afirma que en España hay 676 casos de corrupción que afecta a los ayuntamientos. Un 44% son del PP. El 31,2% pertenece al PSOE y un 2,75 a IU La principal verdad que se desprende de estas cifras es que son falsas las razones de la reforma electoral. Los gobiernos de coalición no son más corruptos que los de las mayorías. Y es más: allí donde gobierna una coalición resulta más fácil su fiscalización y por ende la limpieza administrativa. Casos como el de Marbella solo es explicable si pensamos que allí mandaba un energúmeno caciquil que tenía comprada a casi toda la oposición democrática.