Creo que no descubro nada nuevo si digo que no es lo mismo predicar que dar trigo. Y como supongo que todos ustedes coinciden con esto, me permito recordar dos hechos diferentes. De un lado la hermosa proclamación de afecto, proximidad y cariño de la presidenta de la Junta de Andalucía, doña Susana Díaz, que hace algunos meses afirmó que llevaba Almería en su corazón. De otro lado mencionaré las recientes visitas a nuestra capital del secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, así como la del director general de Sostenibilidad de la Costa y el Mar, Pablo Saavedra. Es cierto que estos últimos no se deshicieron en elogios o mostraron su profundo afecto por Almería con el mismo cariño que la presidenta de la Junta, pero tengo la sensación de que los almerienses no se lo van a tener en cuenta. Más que nada porque la visita del primero trajo aparejado el inicio de unas obras históricas para la ciudad de Almería: el levantamiento de la playa de vías junto a la vieja estación de tren, posibilitando un espacio de encuentro y comunicación verdaderamente espectacular para los almerienses. Y la del segundo supuso la constatación del avance real de los trabajos de  recuperación ambiental del Delta del Río Andarax y la prolongación del Paseo Marítimo. Una prolongación que, como muchos almerienses recordarán, fue puesta en almoneda electoral por la entonces ministra socialista Cristina Narbona, asegurando que esas obras se llevarían a cabo si los almerienses votaban al PSOE en las municipales. Ahí están las hemerotecas para recordar ese momento y ahí están ahora las obras para que los almerienses vean que afortunadamente hay otro modo de hacer las cosas. Y eso significa que Almería va a recuperar en el delta del Andarax un gran espacio que se encontraba en una situación bastante degradada. A la satisfacción del cambio de aspecto de ese lugar hay que añadir la alegría de haber culminado un complejo proceso administrativo Además, ha recordado que “desde el Consistorio hicimos un gran esfuerzo por parte del Ayuntamiento para la obtención del suelo necesario para la ejecución de este proyecto, que irá avanzando hasta conseguir enlazar el Delta con el Paseo Marítimo actual. Estoy seguro de que ello acabará siendo una realidad que mejorará considerablemente Almería, del mismo modo que la actuación en la futura zona verde que propiciará el actual levantamiento de las vías del tren supondrá una mejora espectacular de una ciudad que, además de que la lleven en el corazón, necesita de administraciones trabajadoras, cumplidoras y eficaces que sean capaces de hacer obras y no sólo decir buenas palabras.