Hola papá. Hace un año que te fuiste y te he echo mucho de menos, sobre todo a mediodía, a la hora de comer cuando veo que en tu sitio ya no estás y ahora lo ocupa mamá. Tenías muchas ganas de vivir y yo de que no sufrieras más. Por eso todos los días rezaba para que tu agonía se acabara. Mamá también te echa mucho de menos y la Mari y Lucía. No sé si aquella noche cuando ya te estabas yendo escuchabas lo que te decía al oído, mientras te cogía de la mano. Hoy te escribo aquellas palabras… Te quiero mucho papá, nunca pensé que se quisiera tanto, te voy a echar mucho de menos. Eres un padre muy luchador, trabajador, bueno y el hombre más honrado que jamás he conocido, cuidaré de mamá y no tengas miedo de donde vas, que serás feliz… Por último decirte que volveremos a vernos algún día, que el pieza sigue siendo el pieza y que Fernando es todo un hombrecillo. Te quiero papá.