Pequeño gesto, gran corazón

Babic hizo feliz a una aficionada del Almería

Madre e hija se fueron a casa con el premio, la camiseta de su ídolo Babic.
Madre e hija se fueron a casa con el premio, la camiseta de su ídolo Babic. UD Almería
Carlos Miralles
09:53 • 23 mar. 2023

El sol pegaba de lo lindo en Almería el pasado sábado y la previa del partido frente al Cádiz no fue especialmente fácil para los aficionados que acudieron al Mediterráneo. Muchísimo calor. Pero en la grada de Tribuna había una pequeña aficionada que se pasó todo el calentamiento de pie, en las primeras filas de la grada, con una pancarta vistosa que rezaba: “Babic, te quiero”. A pesar de la lejanía por las pistas de atletismo, que pasarán a la historia con la Fase 2 de remodelación del Estadio, el central se dio cuenta de la situación y tomó nota.



Historia
Equipos a vestuarios y la pancarta lo más arriba posible para que el central balcánico la viera. Cada vez son más ‘canteranos’ en la grada que se animan a ir al fútbol y quieren conocer a sus ídolos. Esto era complicado en tiempos duros de pandemia pero ahora se han eliminado, o se están eliminando, esas barreras o distancia entre el deportista y el aficionado.



Terminó el encuentro con un sabor de boca agridulce porque el Almería rescató un punto en una mala tarde en la que se dejó llevar por los nervios de estar en descenso y el gol que marcó el Cádiz en un saque de banda. Para Babic el resultado queda en el césped cuando pita el árbitro y no dejó pasar la oportunidad de hacer feliz a una pequeña abonada.



Cantera
Le llevó a la grada una camiseta firmada y allí esperaba junto a su madre una persona que con el paso de los años será todavía más del Almería gracias a detalles como el de Babic. Quizá el balcánico juegue en otro club, pero el legado que dejará en la grada será eterno.



Ese “Babic, te quiero”, dio la vuelta al Estadio en la previa del Almería-Cádiz porque hasta las cámaras de Movistar tomaron nota. A veces los sueños de cumplen y cuando esta abonada vaya al colegio o salga a la calle con sus amigas lucirá la camiseta de su ídolo, o por otro lado, la guardará como oro en paño y la pondrá en un marco. Los futbolistas también son personas que sufren, disfrutan, ríen, lloran, y el gesto de Babic fue impresionante. Ellos han hecho despertar la ilusión a nuevas generaciones y no cuesta nada entregar una camiseta. Grande, Babic.






Temas relacionados

para ti

en destaque