Visita a los tres conventos: el Domingo de Ramos de la Cena

Tras salir de la iglesia parroquial de San Pedro por la calle Ricardos y buscar el edificio viejo de Correos, la Hermandad de la Santa Cena cumple cada Domingo de Ramos con una tradición que también se ha visto cumplida en este extraño 2021: la hermandad eucarística visita los tres principales conventos del centro de la ciudad. De la iglesia del Sagrado Corazón va a las Claras, de ahí a las Puras y finaliza este singular recorrido en la Catedral (todo ello, antes de que se ampliara la carrera oficial y se invirtiera el sentido de la marcha).

Para conmemorar esas visitas que hace la hermandad hecha cofradía cada Domingo de Ramos, una representación encabezada por el párroco y consiliario, Juan Antonio Moya, visitó a las Claras, las Puras y las Esclavas (haciendo una parada a las puertas de la propia Catedral) en el segundo Domingo de Ramos más extraño de su historia, después del ‘confinado’ 2020.

Visita institucional

Tras esa ruta conventual en la que la hermandad hizo entrega a las distintas congregaciones de un ramo de flores y un recuerdo de esta visita, después de realizar una lectura, la Hermandad de la Santa Cena recibió en su sede canónica la visita institucional que ayer, y probablemente durante toda la semana, realizaron el alcalde de la ciudad, Ramón Fernández-Pacheco, y el concejal de Promoción de la Ciudad, Carlos Sánchez, a las hermandades que tenían que haber realizado su salida procesional en el día de ayer.

También visitaron a la corporación del Domingo de Ramos los hermanos de la Hermandad de la Macarena, que llevaron flores a Fe y Caridad.

Todo ello, guardando siempre las medidas de seguridad y distanciamiento social, además de respetando el mandato episcopal que no todas las hermandades han cumplido en estos días: los titulares de la hermandad de la Santa Cena permanecían en sus habituales lugares de culto, evitando altares extraordinarios o cualquier otro montaje.

A la puerta de San Pedro, el grupo joven de la Hermandad prendía los ya clásicos lazos de la Santa Cena.

Los titulares

Para el día, tanto el Señor de la Santa Cena como María Santísima de Fe y Caridad lucían sus mejores galas, como si fueran a salir a la calle un año más.

El Señor vestía su túnica burdeos, bordada por Juan Manuel González Hinojosa, así como su mantolín azul marino con bordados.

La imagen de María Santísima de Fe y Caridad, ataviada por su vestidor Juan Rosales, vestía la saya eucarística, el fajín donado por el General Gobernador de la Plaza, Ricardo González Olmedo, su toca bordada en oro fino así como un manto burdeos cedido para la ocasión por las Angustias. El rostrillo está realizado con una nueva blonda bordada.