Gádor Espinosa: “La mujer tiene que hacer lo que quiera, decidir a dónde va”

Gádor Espinosa se define a sí misma como “mujer rural, profesional STEM, emprendedora y woman digital”. Cuenta su trayectoria profesional como si de un cuento con final feliz se tratara.

Apostó por hacer un bachillerato técnico e industrial en los años 80 y allí solo encontró a otras cuatro compañeras de viaje y, todas acabaron en carreras masculinizadas pero esta ingeniera de Caminos, Canales y Puertos tuvo la oportunidad de ser y hacer aquellos proyectos que siempre quiso.

El primero de ellos, la construcción de un puerto en la Isla de Alborán, “cobrando un 40 por ciento menos de lo que correspondía” pero con “una oportunidad que algunos nunca tienen”.

Más barato

Afirmó Espinosa: “Era una gran oportunidad. Era la única ingeniera, ellos estaban obligados a que lo hiciera alguien con titulación pero contratar a un hombre era más caro”. 

Su siguiente paso laboral fue en una constructora en la que “ya solo ganaba un 20 por ciento menos de lo que correspondía” y con 30 años se decide a montar su primera empresa, quizá buscando cobrar lo que le correspondía. Allí llegó a tener a su cargo a cuatro ingenieros pero con el desplome de la obra pública tiene que reinventarse y lo hace apostando por una empresa de base tecnológica. 

Portocarrero Tenders es “un google de licitaciones” que a través de algoritmos permite cada día llevar a todos los usuarios encontrar y preparar las licitaciones públicas.

Cuando quiso montar su empresa lo de conseguir financiación se le hizo complejo ya que “negaron la financiación porque se trataba  de una empresa de base tecnológica pero “una vez que había conseguido fabricar el prototipo solicité un préstamo personal para arreglar mi casa, que todavía no se ha arreglado, y empecé a trabajar”.

Ella misma reconoce que por lo general “las mujeres sin el apoyo de la gran organización, están perdidas”.